Veo hoy en Público una entrevista que hacen a la vicepresidenta Elena Salgado. Y les aseguro que si no fuera porque es un tema tan serio esta entrada figuraría un viernes en el espacio “Risoterapia”, pero como quiera que una de las cosas que no nos pueden quitar es el sentido del humor, aunque no sea viernes, déjenme que les analice algunos de las respuestas de la vice resaltadas por el periódico, y les deje mi impronta personal:
“Zapatero aprieta mucho en los plazos y no siempre se pueden hacer las cosas tan rápido”
Oiga, muy bien, nunca las prisas fueron buenas, sobre todo cuando se tiene éxito y el número de parados sólo va por cuatro millones
“El ICO tiene que ser cuidadoso con los préstamos que da porque es el dinero de todos”
¡Ah!, pero funciona el ICO, y resulta que da dinero, eso sí con cuidado, que el dinero es de todos. Y yo que de esto sé poco pensaba que se trataba de dar créditos con celeridad a las pequeñas y medianas empresas para que se recuperase la economía. En fin, y creía que el dinero que se está utilizando para arreglar bancos, pagar costes de empresas quebradas, también era dinero público, pero no, debe ser que lo pone ella.
“La reestructuración del sector público es muy importante para ganar en eficiencia”
Cojonudo. De acuerdo. Lo que pasa es que no sé cuál es el sector público. ¿Acaso queda algo? Telefónica, Endesa, Iberia,,, y yo que creía que estaba todo privatizado. A lo mejor se refiere a sacar menos plazas de empleo público para “compensar el paro”, pero no, no quiero ser malpensado.
“Si Europa aprueba una tasa sobre los bancos, nosotros también lo haremos”
Bien, muy bien, hay que ser disciplinados, sobre todo porque las directivas europeas obligan a hacerlo. De Perogrullo. Y adelantarnos no, no vaya a ser que se nos cabreen las empresas, sólo cuando no haya más remedio y nos obligan. Mejor si no ocurre.
“¿Mayor presión fiscal para los ricos? No, la redistribución hay que hacerla en el gasto”
Naturalmente, ¿cómo vamos a pedir más a los ricos? Pobrecillos, con la crisis que están padeciendo. Nada, lo que hay que hacer es apretarse más el cinturón. O sea apretarnos el cinturón y gastar menos. O a lo mejor, se refiere al aumento del IVA, ese impuesto “redistribuidor” por excelencia.
Como muestra valen estos botones. Y es que hemos descubierto la nueva maga de la economía neoliberal, la reina del mambo, y del paro. Y no se rían que no es viernes.
Salud y República