Un pionero en investigación que logró la apertura de una compañía de 350 millones de dólares para proveer de baterías a GE y Chrysler ha logrado mejorar la tecnología con la que funcionan las baterías actualmente. Ahora dice que “ésto representa la reinvención de la tecnología de las baterías como la conocemos”.
Aunque todavía está en proceso de investigación, se piensa que podría ser una herramienta muy poderosa y tiene altas probabilidades de llevarse al mercado. Incluso podría revolucionar la manera en la que almacenamos y transportamos energía, en el proceso, se remplazaría por completo el combustible fósil, especialmente el aceite.
La clave para esta nueva tecnología es que los metales, que normalmente serían sólidos en una batería convencional, se rompieron hasta convertirse en pequeñas nano partículas que están suspendidas en un líquido. Este tipo de baterías, mejor conocidas como “semi sólidas”, guardan su poder en un líquido negro (que parece aceite quemado de motor) que se ha bautizado como “Cambridge Crude (Crudo Cambridge)” Ya que la carga es líquida, será posible cargar un carro eléctrico con este líquido, sí, como si estuviéramos cargando gasolina.
Por si fuera poco, este tipo de baterías tienen la posibilidad de brindar el doble de energía que una batería convencional de litio y es más barato fabricarlas. Otra cualidad interesante es que pueden recargarse de la misma manera que lo hacen las baterías que usamos en casa. ¿No quisieran una?