La Organización Internacional del Trabajo (OIT) hizo un balance sobre el trabajo doméstico remunerado en América Latina y el Caribe, en el que destaca los objetivos principales en avances hacia el trabajo decente para las trabajadoras domésticas y visibilizar las buenas prácticas que existen en la región, en temas como la remuneración, seguridad social, la organización sindical, protección de la maternidad, entre otros temas, además de los avances hacia la ratificación del Convenio 189 para las trabajadoras y los trabajadores domésticos, adoptado en la Conferencia Internacional del Trabajo (CIT), en junio de 2011.
“Uno de los grandes ejes de la calidad del empleo es la duración de la jornada laboral. Su reglamentación así como los períodos de descanso, incluidos los días festivos y las vacaciones son fundamentales para el bienestar y la seguridad de las personas que laboran. Para las trabajadoras domésticas son indispensables, pues sus jornadas de trabajo son generalmente largas e intensas, a menudo sin reglas que las limiten.
Afirma la OIT que a las trabajadoras domésticas les resulta particularmente difícil organizarse y que el derecho a la protección de la maternidad tiene especial relevancia para este sector.
Fuente
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