En San Bernardo 73, Gijón
Con el nombre tomado de un oasis en el desierto, abrió hace casi un año este local de visita obligada en Gijón.
Un espacio concebido para que se pare el tiempo en su interior y los sentido se deleiten.
Parte de ese encanto lo consigue una decoración personal y rotunda de la mano de Antonio y Beatriz, matrimonio propietario.
Las claves:
Los tintes naturales de color fuxia, traídos de Marruecos lucen en la gran pared de la derecha, aplicados con métodos tradicionales por la pareja son contrapunto al gris que invade el resto del local. Sobre esta pared corre un banco con tapicería color pavo real.
El mobiliario utilizado es adquirido en anticuarios, alguna pieza de familia, hay elementos de Ikea tuneados e incluso alguna pieza diseñada por los propietarios.
Uno de los aciertos claves en esta decoración es un enorme espejo que cubre la pared del altillo.
Por un lado aumenta ópticamente el espacio y por otro duplica la luz natural del exterior.
El local esta lleno de detalles decorativos traídos de Marruecos cultura que fascina a esta pareja y que es parte de su personalidad. Hasta el último rincón es tratado con mimo y lo que nunca, nunca faltan son: las flores frescas.
Y después de detenernos en esta preciosa decoración.
¿Nos tomamos algo?
Desde Gijón con amor.
Susana