Los 90 fueron la época de los thrillers psicológicos rebuscados, giros locos y malos más listos que el espectador, con Instinto básico como principio y fin de algo que solo el tándem Verhoeven-Eszterhas supo hacer bien. Los mil y un remedos que nos tuvimos que comer terminó agotando el subgénero y hasta en España tuvimos … Continuar leyendo "La perfección, la trampa como estilo"
