Increíble, pero estamos en el siglo XXI y tiene que venir un señor con barbita a rotularnos la parte superior de las Setas con el nombre de Plaza Mayor, ¿Plaza Mayor?, ¿y este era Alcalde de Sevilla?, asi nos lucio el pelo en su años de mandato que no conocía ni la historia de nuestra ciudad, véase de muestra el mobiliario urbano que nos lego en pleno corazón de Sevilla o sus terribles reuranizaciones en pleno corazón de San Luis.
Pues bien refrescando la memoria o cultivando la cultura, sepamos que Sevilla ya tenia su Plaza Mayor en el siglo XVI, plaza que aun mantenemos aunque con distinto caserío pero si con la misma distribución...
Efectivamente, es la actual Plaza de San Francisco, ¡y que imagen tenemos ante nuestros ojos!. En ella todavia descubrimos parte de las viejas casas con balconadas de madera que antaño la poblaron, y si afinan la vista, en la parte derecha de la fotografía tenemos el viejo edificio de soportales sustituido por el actual Banco de España.
Observen con detalle la disposición de las sillas de enea, es la composición de la carrera oficial de aquellos años, sin palcos ni vallas...
Sombreros de ala ancha, boinas, mujeres de riguroso negro, que cantidad de detalles.
Pues bien, como íbamos comentando, esta fue la originaria Plaza Mayor de Sevilla, la de los autos de fe de la Santa Inquisición, la de las corridas de toros y fiestas de caña.
Todo lo demás son simples "catetadas" y egos de un hombre que le dice a Sevilla "si te he visto, no me acuerdo"...
Volviendo a lo que nos interesa, al pasado y su patrimonio, recordemos como ha cambiado esa vieja Plaza, pues no cambio tan solo de nombre sino que también sus edificios. Si comparamos dos imágenes, la que ya hemos visto con una mas o menos actual, veremos en ambas un denominador común...
Tan solo esa casa que señalamos en rojo se mantiene en pie. Por la "Avenida" bajaba una corriente regionalista de edificios que dio de lleno con la Plaza de San Francisco, produciendo una renovación casi completa de todo su caserío a comienzos del siglo XX.
Sevilla seguirá por siempre en una evolución constante aunque de nuestras manos esta el que se siga el respeto por nuestro patrimonio urbano y que aprendamos a seguir conservando antes que derribando...
Elena Morin Traz
Julia Lorina Corza