La Policía de Larreta acaba de reprimir a las enfermeras que se acercaron a presentar un petitorio por mejores condiciones de trabajo.
Tres heridas, una con la cabeza partida de un golpe.
El paladín del consenso manda a moler a palos a trabajadoras que se exponen día a día para salvar vidas en plena pandemia mientras sus seguidores desbordan bares y plazas en toda la ciudad agravando la situación.
Ojalá paren 24 hs. como ya lo advirtieron y los irresponsables que hoy gobiernan esta ciudad se vean obligados a meterse su arrogancia en el orto.