Revista Salud y Bienestar
En Grecia la situación de la sanidad es muy sencilla de explicar. Si tienes dinero te atienden, si no lo tienes no.
La exclusión del sistema sanitario es una desigualdad en salud a sumar a otras (paro, bajo nivel de ingresos, barreras a la educación, adicción a drogas, extrarradio...).
En España la sanidad ha tenido un problema de financiación crónico que ahora se ha agravado. Hay menos dinero, lo que está condicionando recortes. Estos se están haciendo con criterio político y no profesional. Se está amputando a bulto con hacha (recortes lineales) en lugar de hacerlo con precisión usando bisturí (los profesionales hemos hecho propuestas que no han sido tenidas en cuenta). A esto se suma el problema de Madrid, con 7 hospitales sobrantes, sobredimensionados, construidos sin un estudio serio que avalara su necesidad (salvo el posible interés electoralista del momento). Parece que la propuesta gubernamental es primar los hospitales de gestión privada y ánimo de lucro en detrimento de los enteramente públicos (al igual que se hace en el mundo de los colegios y la educación, ¿les suena?).
¿Qué va a suceder? no lo sabemos, pero viendo el ejemplo griego no nos quedamos muy tranquilos.