En estos días en los que Tenerife, La Palma y La Gomera se han enfrentado al fuego, una de las palabras más oídas ha sido “previsión”, por supuesto, para relatar su carencia. Dicen los vecinos de corrillo en las aceras que los incendios se han debido a que los montes no están limpios, que las autoridades no han hecho su trabajo. Dicen a su vez los políticos y algunos medios de comunicación que la crisis económica ha impedido la previsión al no contar con el dinero necesario. No es la primera vez que, ante una situación de emergencia en estos tiempos, se recurre al binomio crisis económica-falta de previsión. Pues no me vale. Hace muchos años, un experto endocrinólogo del Hospital Universitario de Canarias, el doctor López Alba, me decía en una entrevista que se dedicaban millones de euros en curar enfermedades cuando dotaciones presupuestarias menores en campañas preventivas ahorrarían al Estado mucho dinero y a los pacientes sufrimiento, al no desatarse la dolencia. El mismo pensamiento me ha asaltado con muchos de los recortes planteados por Mariano Rajoy desde que ascendiera al trono gubernamental de España. Quitarle, por ejemplo, la asistencia sanitaria básica a los inmigrantes sin papeles, ¿no supone que dolencias fáciles y más baratas de curar derivarán en visitas continuas a los servicios de emergencia hospitalaria y, por tanto, más caras para el estado? El inalcanzable para muchos y mal llamado copago (en vez de repago) farmacéutico ¿ no nos llevará a mayores gastos al no poder muchos pacientes costearse el plus de los medicamentos y por tanto abandonar sus tratamientos? La inversión en el cuidado de nuestros montes, o de supervisión de aquellas empresas encargadas de su limpieza, o de personal contratado por las administración para la vigilancia y prevención de los incendios… ¿no es más barato que tirar de hidroaviones, bomberos, profesionales varios y ayudas por la pérdida de casas, por ejemplo? No, señores, la previsión no es cara, todo lo contrario, no nos tiren tierra a los ojos…
Una muestra de la riqueza natural de la isla de La Palma. El Tablado (Garafía).