La primavera ¿La sangre altera?

En teoría la primavera entró la semana pasada, en la práctica es que ayer estábamos con cuello vuelto y aunque hace sol a ver quien es el atrevido que se pone la chaquetita que nos venden los grandes almacenes porque ya es primavera.

¿Habéis pensado alguna vez cómo nos afecta? Nos eleva el estado de ánimo porque hay más luz, los días son más largos, parece que tienes más tiempo cuando sales del trabajo, las temperaturas suben y de repente los telediarios empiezan a hablarnos de las vacaciones, las playas, la operación bikini y que a partir de ahora todos tenemos que estar contentos y felices pero, ¿Cómo es la otra cara de la moneda? Hay personas que no lo viven de la misma forma, uno es por la preocupación del físico que hasta ahora los abrigos lo tapaban, otra es la economía si no te permite salir a tomar unas cañas y mucho menos irte de vacaciones, cuando no tienes con quien viajar, cuando nos damos cuenta que las relaciones sociales se ciñen al trabajo. Añadamos los que tienen que doparse a antihistamínicos por las distintas alergias. Además esta semana ya es Semana Santa, eso quiere decir que los niños no tendrán colegio durante 10 días, biennnnnn!!!! Con quien les dejo? ¿Cómo van a ser mis vacaciones realmente si es que las tengo?

¿Cuál es la mejor forma de adaptarse a este cambio de estación?  Os diríamos que vinierais a la consulta a daros el “bálsamo de Fierabrás” que con una gota te curaba todas las heridas, que es lo mismo que nos venden en las farmacias para quitar la celulitis, que los hombres tengan la tableta de chocolate con una crema, para dar brillo al pelo, con unas gotas te sube el estado de ánimo, broncearte más rápido, blanqueamiento dental. Por un módico precio tienes un entrenador personal y ofertas en el gimnasio!!.

Os ofrecemos una fórmula más baratita que es la magia de usar los cinco sentidos.

1. La vista: mira lo que tienes alrededor, ¿Te has dado cuenta que tu vecina tiene macetas? ¿Qué tienes un parque al lado de tu casa? Observa como se pone el sol en el horizonte al atardecer, la luz que desprende el sol y que solo dura unos minutos (que no solamente existe en Ibiza). También los distintos tonos que van surgiendo en la naturaleza.
2. El oído: Cierra los ojos y escucha a los pájaros, las risas de los niños y las personas, el murmullo de lo que hablan, incluso podemos llegar a disfrutar del sonido estridente de los coches, escuchemos parados la vida pasar.
3. El olfato: Las puertas y ventanas están más abiertas y los distintos olores cruzan el umbral de ellas, permitamos que entren y nos calen dentro. Un mercado, las frutas, las flores, las distintas comidas frescas y sanas, la hierba recién cortada, el olor de la lluvia.
4. El tacto: La primavera la sangre altera, toquémonos entre nosotros, empieza por tocarte a ti mismo, incluso dándote una crema despacio, disfrutando de un pequeño masaje, abraza a las personas que quieres,
5. El gusto: Saborea las frutas al meterlas en tu boca, del frescor de alguna bebida, de un beso.