En los años previos a 1914, las alianzas públicas no estaban grabadas a fuego: oscilaban, vacilaban, cambiaban.
Los franceses inauguraron el siglo con una posible invasión de Inglaterra e Irlanda señalada en sus escenarios de guerra; y en 1905, los británicos aún tenían planes de contingencia para una posible guerra con Francia.
Estos últimos también creyeron que Rusia podría abandonar la Triple Entente y unirse a la Triple Alianza.
En 1912, el conde Berchtold, de Austria coqueteó tratando de acercarse a San Petersburgo, aunque este movimiento se fue a pique por las diferencias irreconciliables con respecto a los Balcanes. Al año siguiente, Alemania ofreció préstamos a Serbia.
Entre la primera generación de los eruditos de Rhodes en Oxford, muchos eran jóvenes alemanes, cuya presencia reflejaba el respeto, incluso la reverencia, de los británicos por la cultura de su nación. Y la industria: hasta 1911, Vickers colaboró con Krupp en el diseño y la manufactura de las espoletas de obús.
Fuente:
- "'1914. El año de la catástrofe' -Max Hastings".