Disney me abrió la puerta del cine en los ochenta con Los Aristogatos, no recuerdo mucho la película... de hecho no la he vuelto a ver... siento que fue uno de los primeros momentos en que el rectángulo de luz me comenzó a cautivar... antes ya lo había hecho con la generación de mis padres. Cuando estuve en París la hija de mi amiga con sus tres añitos, la llevamos al cine, en el Gran Rex de los Grandes Boulevares, la película era "Madagascar 2" con un increible espectaculo de animatronics y juegos de agua y laser que los niños alucinaron, después la película... ahí la cosa no resultó tan bien... al rato se aburrió y salía a cada rato del cine. La segunda vez que fue al cine... lo pasó increible... jugando en las escaleras del cine...
Pero este verano, ahora con un año más fuimos a ver "La Princesa y el Sapo" los dos mirando como reaccionaría esta vez con la película. Miraba la película con poco interes hasta que comenzaron a cantar... todo cambió, andaba con unos binoculares así que veía de cerca como cantaba los sapos y lo que más me impresionó fue que en una escena en que los cocodrilos del Missisipi se querían comer a los protagonistas, ella saltaba, se tapaba los ojos y se alegraba porque se salvaban... ese es el momento en que el cine se adueña de cada uno y capta todas sus sensaciones...
En la época de las animaciones digitales, que Disney estrene una película al viejo estilo del pincel, es un regalo para todos, no se puede renunciar a una técnica por la aparición de otra (al menos eso creo yo) y en este caso todo mejorado, los colores, el pincel mucho más bello que siempre. Después de Katrina Nueva Orleans se merecia el homenaje que Disney hace para ella. Renaciendo de las ruinas del huracán y del olvido.
En una historia sin conflictos de color de piel, ha convertido a esta ciudad desde siempre en un lugar de tolerancia y entendemiento.
El cuento... parecía ser el mismo de siempre... la princesa se encuentra con el sapo que le dice que es un príncipe, y que si lo besa rompe el encantamiento... en éste caso la historia tiene una pequeña modificación porque Tiana que cocina como los dioses, se encuentra con el sapo y al besarlo... se convierte ella en sapo. Los dos batracios en medio de persecuciones deben llegar hasta donde Mamá Odi... guiados por una vieja luciérnaga llamada Ray.
El cine esta lleno de magia, ahora mi sobrinita entró a la vida en treinta y cinco milímetros, porque aprendió a querer el cine, a usar todos sus sentidos para vivir la historia y ver más películas. Por mi parte sigo siendo un niño cada vez que disfruto de otra canción, de otro color, de una nueva historia. En esa fuente inagotable de imaginación que en más de cien años nos regalaron los hermanos Lummiere, sigue por generaciones haciendo que amemos mejor (no se para ustede pero me hizo feliz ver como ella disfrutó de la película).... Disney lo hizo de nuevo!
Saludos a todos.
1.- Película en IMDB
2.- Comentarios en Filmaffinity
3.- The Princess and the Frog en Wikipedia
4.- Trailer