Oruga procesionaria
La mayor parte de su vida la pasa en las ramas de los árboles (pinos mayoritariamente, y también en cedros y abetos). Cuando empiezan a subir las temperaturas bajan de los árboles para realizar su peregrinación anual a zonas donde puedan enterrarse y convertirse en mariposas. La peregrinación es muy peculiar, ya que podemos ver a varias orugas en fila india, unas seguidas de otras. En procesión, de ahí su característico nombre.
El principal peligro de estas orugas procesionarias estiba en los pelos (tricomas) que tienen alrededor. Son tremendamente urticantes y pueden ocasionar graves lesiones a perros y gatos, o incluso la muerte si son ingeridas y no actuamos a tiempo.
No dejéis que vuestras mascotas se acerquen a estas orugas. Si se acercan, que no se acerquen a olisquear y mucho menos que se traguen una. Como ya he dicho antes, el veneno urticante de los pelos de las orugas podrían ocasionar el colapso del animal al cerrarse el esófago, necrosis de la lengua u hocico.
La primavera no sólo trae campos verdes y grandes prados para que nuestras mascotas corran. También traen animales nocivos para ellos y que pueden ocasionarles serios daños. Tened cuidado con ellos, que en un descuido pueden dañar mucho a tu fiel amigo.
Evitad las zonas donde haya pinos en los paseos con vuestros perros para minimizar el contacto con esta oruga que últimamente se ha convertido en una plaga y que amenaza su salud seriamente.