Resulta que un sábado por la tarde nos dimos cuenta con mi esposo que terminábamos siempre comiendo chatarra. Los lugares de comida rápida son atractivos por su comida (no exactamente por ser saludable), porque ofrecen juguetes y/o precios accesibles. Y claro, hay juegos para que los niños se entretengan y una pueda tomarse un café con mediana paz.
Pero ¿no les aburre? Digo, no está mal de vez en cuando, pero de repente caes en un círculo sin salida. O así nos sentimos varias veces nosotros, y seguro más de alguna pareja más.
Gracias a Dios que escuchó nuestros ruegos, jejeje. La Puerta Naranja es una excelente opción para los padres, que como nosotros, desean algo más para pasar una tarde en familia.
Así es como surge La Puerta Naranja en la mente y el corazón de Natalia Santillana, también conocida como "La mamá de Mía" Su sueño es ahora una realidad.
Además de estos rincones maravillosos, con juguetes educativos y seguros para niños y niñas, de todas las edades; La Puerta Naranja es un espacio para consentir también a los papás y mamás que buscan un lugar tranquilo para descansar y, por qué no, distraerse un rato de las carreras del día a día.
Según Natalia, esta bella idea nació junto con Mía, y ha venido evolucionando. Uno de sus principales preocupaciones es ofrecer un remanso de paz donde las mamitas puedan sentirse seguras de que sus hijos se divierten y ellas puedan descansar.
Para eso existe una maestra y una nana pendientes de los niños, si acaso alguna mamita va sola con sus chiquitines. También puedes reservar el lugar para realizar eventos, como piñatas.
La Puerta Naranja está abierta de martes a domingo, de 9 am a 6 pm. Lugar súper recomendado, date la oportunidad de conocerlo. Puedes encontrarlos en redes sociales como FB: @lapuertanaranjasv
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