La sentaron a mi lado el primer día de clase, era morena parecía gitana o mora, era agradable y simpática, nos reímos charlando durante las clases. Me dijeron que tenía una relación con un tipo de ojos azules, que vendría a hablar conmigo, no le gustaba que otros hombres hablasen con su novia. Cuando vino intente mostrarme, tranquilo, pero de seguro parecí bastante nervioso. -Ya sé a qué has venido- le dije -¿Entonces qué haces que sigues hablando con ella?- su mirada era hielo, iba sin afeitar. -Es un poco difícil se sienta conmigo, no quiero ser desagradable - Ojos azules sonrió- redúcelo a lo necesario- -Lo intentare- -Bien- Se fue. La chica no me importaba demasiado, era simpática, era agradable pero no pensaba que se pudiera interesar en mí, ella estaba en otra liga. No pare de pensar en ojos azules, encerrado en mi habitación, mi mente huía imaginando prados desiertos y carreteras infinitas. La chica no me importaba, era guapa y atractiva, pero no creía que pudiera estar interesada en mí. No era más que una amiga. Era ojos azules, desde que le vi le odiaba y desde que abrió la boca, lo quería muerto. Tuve ganas de llorar todo el rato, no podía pensar en otra cosa. Mi mente se dividió, cada una de mis partes encarno una emoción y todas juntas debatían. -Deja de hablar con ella y punto- -¿Y ser la putita de ese tipo? ¿Dejar que mañana decida que no puedo hacer otra cosa y obedecer ?, mañana lo dejara con la morena y empezara con la rubia y no podre hablar ni con la morena ni con la rubia- -Pártele la cara en dos, ya sabes de un golpe- -Eso puedo intentarlo, creo que tengo un buen bíceps.- -Para pegar puñetazos es más importante el tríceps- -También tengo uno bueno de esos- dije yo. Me pelee con ojos azules por decirme lo que podía y no podía hacer, por meterme miedo, por hacerme creer que era un cobarde. Le solté el primer puñetazo sin avisar, iluminando su cara como una detonación de magnesio mientras me miraba con miedo, con sorpresa, que buena foto, que buen instante. Yo era el loco y nos pegamos, yo pegaba mejor y el me gano. A final vinieron un motón de tipos que me levantaron en el aire y me llevaron a otro sitio, pensé que me darían una paliza entre todos y que moriría aquel día, pero no, ojos azules apareció y me pregunto por qué. -Tu a mí no me dices con quien puedo hablar y con quien no, mierda que eres una mierda, la chica me importa tres carajos y medio, lo que me jode es que vengas tu a intimidarme, a comer pollas te puedes ir, tú me matas ahora mismo pero todo el mundo sabe ahora, que aquí la puta, eres tu.-