Revista Fútbol
El transistor grito gol, fue lo último que escuchó, su corazón no lo pudo resistir, era el último partido de la jornada, el último minuto del partido y el único pronóstico que le quedaba por acertar para dar con un pleno al quince que le supondría un montón de millones de euros. Murió con una sonrisa en los labios sin llegar a escuchar que el comentarista del partido anunciaba que el gol había sido anulado.