A pesar de los esfuerzos por parte del Gobierno en anunciar una pronta mejoría de la economía del país, el drama del desempleo continúa marcando la realidad de España. Más de seis millones de parados es la histórica cifra que arroja la Encuesta de Población Activa, publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Durante el primer trimestre del año el desempleo creció en 237.400 personas, situando el número de personas sin empleo en 6.202.700. La tasa de paro se eleva hasta el 27,16% de la población activa.
El número de personas trabajando desciende en 322.300, hasta un total de 16.634.700, lo que representa el nivel más bajo desde 2002. La ocupación en el empleo público disminuye en 71.400 personas y en el privado en 251.000.
En cuanto al número de personas que llevan más de un año en paro, los llamados de larga duración, aumentó hasta 111.200, situándose por encima de los 2,9 millones de personas. La tasa de paro juvenil sobrepasa el 57%, lo que implica que más de 960.000 jóvenes menores de 25 años están desempleados.
También se eleva el número de hogares con todos sus miembros en paro hasta alcanzar la cifra de 1.906.100, 72.400 más que en el cuarto trimestre de 2012. Y disminuyen los hogares que tienen todos sus activos ocupados en 449.800.
El paro subió en todas las Comunidades Autónomas, excepto en La Rioja, y castigó especialmente a Andalucía, Comunidad Valenciana y Baleares. La mayor destrucción de empleo se produjo en las jornadas a tiempo completo, de todos los sectores.
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