Esto que tenemos aquí, es un todo en uno: amistad, traición, venganza, amor, odio, mucha inteligencia, niños ricos, sexo, sensibilidad, incomunicación, etc. Todo, y repito, todo está contenido en un montaje frenético, pero no agobiante; una puesta en escena grandiosa (Fincher ya no tiene nada que demostrar); una música perfecta; un reparto realizando un trabajo excepcional; y un guión sublime (es de Sorkin, no se esperaba menos). Una de las mejores películas en los últimos años.
Mi Puntuación: 8.9