
Los recientes cambios normativos en el mercado del alquiler residencial en Catalunya han generado un desplazamiento del interés inversor hacia activos alternativos que ofrecen mayor estabilidad regulatoria. En este contexto, la empresa MultiTrastero , especializada en la venta de trasteros en Barcelona, ha observado un incremento significativo en la demanda de espacios de almacenaje como opción de inversión.
Este tipo de activo inmobiliario resulta accesible para capitales moderados y muestra un comportamiento menos expuesto a incidencias propias del alquiler de vivienda. La tendencia refleja una búsqueda de rentabilidad diversificada en un entorno de creciente incertidumbre normativa.
El endurecimiento del control de precios y la mayor regulación del alquiler de temporada han modificado la dinámica del mercado residencial, impulsando a numerosos pequeños inversores a explorar alternativas fuera de este segmento. Según diferentes consultoras inmobiliarias citadas recientemente en medios nacionales, los trasteros están emergiendo como uno de los activos más atractivos dentro de la inversión inmobiliaria urbana.
Su precio de entrada, habitualmente comprendido entre los 7.000 y 12.000 euros, los convierte en una opción accesible en comparación con otros activos comerciales que requieren niveles de capital más elevados. Asimismo, la ausencia de elementos susceptibles de deterioro y el bajo coste de mantenimiento favorecen un comportamiento más estable a largo plazo. Los datos del sector reflejan rentabilidades netas que suelen situarse entre el 8 % y el 11 % anual, dependiendo de la ubicación, la calidad constructiva y la demanda del entorno urbano en el que se encuentren.
El crecimiento de la demanda de trasteros se relaciona directamente con la densidad urbana, la reducción del tamaño de las viviendas y la necesidad de espacios de almacenaje próximos al domicilio. Empresas como MultiTrastero desarrollan proyectos en planta baja dentro de zonas consolidadas, lo que permite responder a una necesidad práctica del entorno urbano.
La compañía ha incorporado criterios de calidad constructiva como muros de hormigón, sistemas de ventilación forzada y puertas ignífugas, además de garantizar que cada proyecto cuente con licencia de actividad. El 40% de sus unidades se destina actualmente a perfiles inversores, lo que confirma el creciente interés por este tipo de activo.
La expansión del sector ha sido notable durante los últimos años y se prevé que siga evolucionando a medida que más particulares y pequeños inversores buscan alternativas que no dependan de la regulación del alquiler residencial en Catalunya.

