Boudicca, nacida alrededor del año 30 d.C., era la esposa del rey de la tribu de los icenos, Prasutagus. Durante su reinado, el rey había mantenido una relación de alianza con los romanos quienes les permitieron una cierta libertad de movimiento disfrutando de un período de paz en su historia. Pero el hecho de que Prasutagus y Boudicca no hubieran tenido hijos varones complicaba la situación futura, cuando el rey falleciera. A pesar de que Prasutagus pactó con los romanos una futura alianza y gobierno conjunto entre el imperio y sus hijas, al fallecer alrededor del año 60, su última voluntad no fue respetada. Roma no aceptaba que el poder pudiera traspasarse por vía femenina así que tras la muerte del rey de los icenos, hizo de este pueblo uno más de los que sucumbieron a su voluntad. Muchos de sus ciudadanos fueron esclavizados y las tierras y posesiones confiscadas. A la reina, mientras veía cómo sus hijas eran violadas por las huestes romanas, s
e le exigió el pago de la deuda contraída por su marido con el imperio.Boudicca decidió entonces rebelarse contra Roma, algo que era a todas luces un suicidio pero que ella consiguió al menos intentarlo. A Boudicca se unieron otros pueblos vecinos que soñaban con liberarse de las cadenas de Roma. Con una voluntad de hierro, la reina de los icenos organizó un ejército que consiguió conquistar Camulodunum y Londinium.
Los ejércitos romanos, al mando de Cayo Suetonio Paulino, el entonces gobernador de Britania esperó a Boudicca en un territorio situado entre Londinium y Viroconium donde tuvo lugar la terrible batalla de Watling Street.
Boudicca y su ejército de hombres mal armados y mujeres y niños no consiguieron, a pesar de su superioridad numérica, doblegar las imparables legiones romanas. Ante la inminente derrota, Boudicca desapareció de la historia. Según Tácito, se suicidó antes de ser apresada, mientras que Dión Casio asegura que falleció a causa de las heridas sufridas en la batalla.