Un nuevo estudio ha demostrado que la ingesta de cafeína por parte de la madre no da lugar a problemas de sueño en bebés, es decir, el sueño del bebé no se verá afectado ni dañado porque su madre tome café en el embarazo, teniendo en cuenta que hablamos de una cantidad de una o dos tazas de café al día.
Para llegar a este resultado se ha realizado un estudio en Brasil con casi 900 madres, teniendo en cuenta que muchos estudios relacionaban el consumo de cafeína en el embarazo con nacimientos prematuros o abortos espontáneos y otros estudios no demostraban este mayor peligro, pero ninguno de los estudios se paró a ver cómo afecta en el sueño del bebé la ingesta de cafeína en el embarazo por parte de la madre.
Los resultados no apoyan el alto consumo de cafeína, sin embargo afirman que el consumo de cafeína en el embarazo por parte de nodrizas no tiene consecuencias en el sueño de los bebés cuando tienen tres meses de edad, de hecho las cantidades pequeñas o modestas de cafeína no aportan riesgos. Las madres fueron entrevistadas a los 3 meses de edad de sus hijos para conocer la relación entre su ingesta de cafeína con los hábitos de sueño de sus bebés. No se encontraron relaciones entre el sueño de los bebés y el consumo de cafeína de las madres.
Casi el 15% de mujeres indicaron que sus bebés se despiertan más de 3 veces por la noche, algo que es habitual y normal, sin aumentar las probabilidades en las mujeres que consumen más cantidades de cafeína en el embarazo.
En el embarazo, una o dos tazas diarias de café al día es seguro, en la lactancia menos de 300 gramos de cafeína al día está bien, aunque los bebés prematuros y recién nacidos son más sensibles a la cafeína, mayor cantidad de los 300 gramos sí afectaría al sueño de los bebés.