Hace años atrás escuchar sobre robótica era un viaje a la imaginación, donde películas como Terminator, Wall-E o Robocop son típicas referencias. En la actualidad la robótica convive con nosotros ya sea en casa, en el trabajo y en diferentes actividades recreativas. Está claro que la tecnología ocupa un lugar privilegiado en sistemas productivos, en el sector de la salud, en el sector de la construcción y también en el sector educativo. La robótica irrumpe en las aulas para que los niños aprendan cómo crear y programar sus pequeños comandos robóticos de una forma divertida.
Las escuelas se han lanzado de lleno a añadir en sus planes educativos asignaturas de tecnología, y la robótica es una de las más demandadas. ¿Por qué la robótica como medio educativo? Se trata de una especialidad donde confluyen diversas habilidades muy nutritivas para los niños desde el trabajo en equipo, una estructuración del pensamiento resolutivo, habilidades comunicativas, observación, análisis crítico, gestión del fracaso, la paciencia y la perseverancia. La robótica puede aplicarse a diferentes campos educativos, ya que ofrece un proceso de aprendizaje que facilita la experimentación y el pensamiento aplicado.
“La robótica no es más que un medio, una manera de que los niños puedan experimentar y plasmar sus propias ideas en algo concreto. No deja de ser una vía donde animar a los niños a emprender y apostar en sus ideas, y darle herramientas y habilidades para que cumplan sus ideas sin olvidar los diversos conocimientos que adquieren en clase de robótica”, indica Sandra Huerto, directora de Tresdosú.
En los últimos meses el mercado de los juguetes para niños se ha llenado de robots como Bee-Bot, Zowi, Dash&Dot, mientras que otros han optado por fabricar robots utilizando piezas de Lego o reciclando envases. Existen diversas formas de programación como Scratch, code.org o Arduino, todas ellas se adaptan a cualquier proceso educativo ya que permite trabajar por bloques.
La robótica ha llegado a las aulas, y esto no afecta sólo a los niños sino implica un cambio en la formación profesional por parte del equipo docente que debe incorporar nuevas formas de hacer.
Se trata de una asignatura de valores, de habilidades, de competencias, de hacer que los niños liberen su ser más creativo e emprendedor.
“Una máquina puede hacer el trabajo de 50 hombres ordinarios, pero ninguna máquina puede hacer el trabajo de un hombre extraordinarios” (Will Smith)