El Málaga está viviendo una época de muchos cambios desde la llegada del jeque qatarí, Abdullah Al Thani. Uno de los aspectos más significativos atañe al estadio, sobre todo, a su interior. Y es que una de las principales pretensiones del jeque al llegar al Málaga era mejorar La Rosaleda.
Así, hemos podido ver un césped totalmente nuevo. Tal y como avanzábamos a principios de verano, el Málaga levantó el verde para colocar uno de mejor calidad. Además, habrá un experto que se ocupe de su cuidado para evitar que se deteriore como en años anteriores. Ahora, el césped de La Rosaleda parece una auténtica alfombra.
Otro de los aspectos más destacable es la eliminación del cemento en los límites del rectángulo de juego. Resultaba muy peligroso para los jugadores. En su lugar, ahora hay césped artificial.
Los banquillos tampoco se han salvado de la quema. En un principio, la idea era bajarlos de nivel, pero el técnico, Ferreira, se opuso. Así, se ha renovado totalmente. Son asientos confortables, en lugar de las sillas de plástico. Ocupan más espacio y están pintados de color morado, lo que, unido al verde del césped, forman la bandera malagueña.
Propio de los mejores estadios, el nuevo Málaga cuenta con valla electrónica de publicidad rodeando todo el campo. Antes solo ocurría en los partidos relevantes, pero ahora estará siempre. También podrán disfrutar los aficionados de una megafonía con un sonido muy bueno -al contrario de lo que antes sucedía-. Es más, todas las indicaciones se traducen al inglés.
Por último, tal y como ordena la nueva normativa de seguridad, las escaleras de las gradas se han pintado de color amarillo, que contrasta gratamente con el azul y blanco de las gradas. El exterior del estadio también se está mejorando, con una capa de pintura.
