Varios estudios científicos ya han demostrado las propiedades antioxidantes que tiene el tomate y sus beneficios para la salud. Pero, lo que la mayoría no sabe, es que la salsa de tomate frito es aún más antioxidante que el tomate crudo. Ahora, un estudio dirigido por el Institut Català de Ciències Cardiovasculars (ICCC), en el marco del proyecto de I+D en alimentación y salud Henufood, liderado por Gallina Blanca Star, pretende ir más allá y demostrarlo científicamente.
El proyecto busca determinar cuáles son los ingredientes de la salsa de tomate que hacen esta función antioxidante y en qué cantidad tienen que estar presentes para potenciar los efectos preventivos de las enfermedades cardiovasculares.
Concretamente, los investigadores del ICCC se centran en los efectos antioxidantes del licopeno, presente en el tomate, cuando está cocinado y combinado con otros ingredientes antioxidantes que contiene la salsa de tomate, como el aceite de oliva. Como explica la Dra. Lina Badimon, directora del ICCC y responsable de la investigación, “el licopeno de un alimento elaborado como una salsa de tomate frita con aceite de oliva es más biodisponible, ya que la interacción entre los alimentos cocinados hace que sea más fácil para nuestro organismo asimilar los antioxidantes que contienen”.
Al mismo tiempo, uno de los objetivos principales de la investigación, que finalizará el 2013, es poder establecer cuál es la cantidad diaria recomendada de salsa de tomate para que ejerza un óptimo efecto antioxidante capaz de limitar el daño endotelial y facilitar una respuesta mejor de la función vascular, ante un posible accidente cardiovascular.
Actualmente, las investigaciones del ICCC se encuentran en una fase preclínica, aunque se espera que en el próximo año se inicien las fases clínicas del ensayo del que se obtendrán resultados concluyentes en 2013.
-El papel de los antioxidantes en la prevención de las enfermedades del corazón
Los alimentos son el resultado de una mezcla de distintos nutrientes. En el caso del tomate encontramos licopeno (pigmento vegetal que da el color rojo característico al tomate) y la vitamina C, ambos con una función protectora de nuestro organismo, y en concreto en la prevención de patologías del corazón.
Por esta razón, la investigación se centra en conocer las concentraciones en que estos componentes ejercen un efecto saludable, no sólo de manera individual sino en el contexto de todo el alimento. Se trata, por tanto, de establecer las sinergias que se producen entre los diferentes componentes y que condicionan su eficacia para la salud.
En la mayoría de las patologías crónicas, asociadas a un riesgo cardiovascular como la obesidad, la hipertensión arterial, la dislipemia, la diabetes o el síndrome metabólico, se produce un aumento de la degeneración y el envejecimiento celular. Los antioxidantes como el licopeno ayudan a proteger las células de las agresiones externas que causan su envejecimiento prematuro y tienen, por lo tanto, una acción preventiva ante las enfermedades cardiovasculares.
-Día Mundial del Corazón
La OMS celebra cada septiembre el Día Mundial del Corazón, un evento para concienciar a la población sobre las enfermedades cardiovasculares, como el infarto de miocardio o el accidente cerebrovascular, que causan más mortalidad en el mundo. Un total de 1,7 millones de personas mueren cada año en el mundo por esta causa.
La prevención es clave para hacer frente a esta enfermedad ya que un 80% de los infartos de miocardio y los accidentes cerebrovasculares se pueden prevenir siguiendo una dieta sana, realizando actividad física regular y abandonando el consumo de tabaco.
-¿Qué es el proyecto Henufood?
Henufood es un proyecto pionero de investigación científica en alimentación y salud, liderado por la empresa catalana de alimentación Gallina Blanca Star que, con un presupuesto de 7 millones de euros, ha impulsado esta iniciativa consciente del papel que la alimentación diaria puede jugar en la prevención de determinadas enfermedades crónicas como la diabetes, la obesidad, la hipertensión o las patologías cardiovasculares.
En el marco de este proyecto, Gallina Blanca también desarrolla estudios con el Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, el Vall d'Hebron Institut d’Investigació y la Universitat de Lleida, con el objetivo común de investigar alimentos e ingredientes de nuestra dieta habitual (como sopas, caldos y salsas de tomate) para prevenir el riesgo de padecer enfermedades crónicas.