Tercera entrega de la saga de Geralt de Rivia, esta vez el mundo se agranda, se acabaron los relatos cortos que nos iban dando retazos del mundo, ahora toca la trama de verdad.
Acostumbrado a la rapidez con la que se leían los relatos de los dos primeros libros este se me hizo un poco más largo, aunque puede que se deba simplemente a que todo el libro es una gran historia más que muchas mini historas.
La historia va saltando de un lugar a otro (¡se siente, Geralt ya no es el protagonista de todos los capítulos del libro!), los capítulos no son autoconclusivos, como nos tiene acostumbrado Andrzej Sapkowski, .
Sin embargo se agradece una mayor profundidad en la historia, ¡Cuidado, si no has leído los libros anteriores, spoilers! ya que se desarrolla más la historia de Ciri, a la que todo el mundo da por muerta y a quien Geralt toma en custodia, ya que en el anterior libro acaba rindiéndose a su destino. ¡Y se acabaron los spoilers!
En resumen, este libro abre subtramas, presenta muchos personajes nuevos y te deja con ganas de más, ¡espero que esto se resuelva en próximos libros!
P.D.: ¡Esto de las reseñas de segundas y posteriores entregas de una saga está difícil! O dices demasiado o no dices nada...