Por lalunagatuna
"La Orden de la Serpiente de Bronce" es la más influyente de todas las sociedades secretas ocultas fundadas en Jerusalén durante la era Templaría, una sociedad secreta de élite dentro de otra sociedad secreta; la de los Templarios .
Nació fundándose sobre ciertos manuscritos cifrados descubiertos en tierras Judías que describían cinco extraños rituales de iniciación, escritos por el mismo Moisés. Sin embargo, la naturaleza de la Orden de la Serpiente de Bronce fue transformada por uno de sus líderes Godofredo de Buillón, héroe Templario de las Cruzadas, quien aseguraba estar en contacto con los 'Amos Secretos', los invisibles y altamente evolucionados superhumanos que forman, según aseveraciones de los ocultistas, "el gobierno secreto de nuestro planeta".
Sin embargo, la Masonería Egipcia está más íntimamente relacionada con la Logia del Gran Oriente de Francia creada originalmente por la Orden de la Serpiente de Bronce, estrechamente ligada con la Sociedad de Jacobinos.
Un Iluminatus secreto y Jacobino fue Giuseppe Balsamo, alias Cagliostro, quien legó cierto Manuscrito Secreto a sus seguidores de la secta Egipcia, incluyendo extractos del Necronomicon (en griego νεκρονομικόv) original. El texto del Necronomicon conseguido merced a los árabes españoles Kitah Al-Azif (en árabe: "el rumor de los insectos por la noche", rumor que en el folclore arábigo se atribuye a demonios como los djins) volvió a los persas y permitió enlazar la magia babilónica y la tradición herm ética de sacerdocio egipcio de Thoth.
Cagliostro fue un Iluminado y Jacobino secreto que, como Rasputín en Rusia, desempeñó un papel clave en la Revolución desacreditando a las familias reales para su posterior caída.
El ritual de la Serpiente de Bronce , el del fiero Reptil del Poder que podía ascender desde los genitales al cerebro mediante prohibidos y extraños rituales , el de la Comunión Eucarística de la Inmortalidad bebida en indescriptibles ritos realizados por aquellos que quieren reemplazar a Dios Falso por el Dios Verdadero.
El secreto gnóstico enseñaba que Neschek, la Serpiente del Génesis, poseía el número 358, el mismo número que Messiah, por lo que la Serpiente es el Mesías. Todas las palabras con el mismo valor numérico cabalístico son los nombres de la misma entidad metafísica- La Francmasonería, empezó con los Caballeros Templarios, como se argumenta en el libro Los Amos Secretos. El que los historiadores no masones considerasen la historia del origen de la masonería como un mito, era debido a que sólo conocían los rituales y enseñanzas de las órdenes masonas públicas. Los que estaban al tanto de los secretos de la orden masónica podían ver fácilmente, la directa influencia desde los Caballeros Templarios hasta el presente.
Por otra parte, desde la destrucción de los Templarios por la Sagrada Inquisición en 1314, dos tradiciones distintas de Francmasonería mística, cada una de las cuales denunciaba a la otra por falsa y absurda. Los que aceptan la culpabilidad de los Templarios y los que la rechazan. Los cargos contra los Templarios, incluían la blasfemia, perversiones sexuales y magia negra.
Todos los historiadores reconocen que estas acusaciones fueron lanzadas por Felipe II, rey de Francia, para hacerse con las enormes riquezas de los Templarios.
Pero no hay dos historiadores que estén en total acuerdo acerca de la veracidad de los cargos. Todo el asunto es mucho más complicado de entender debido al inconsistente comportamiento de Jacques de Molay, Gran Maestre del Temple.
El hecho es que de Molay dejó a su muerte una ambigua herencia. Tras ser arrestado, confesó bajo tortura todos los cargos efectuados contra la Orden de los Templarios, incluyendo extremos tales como que escupían el crucifijo y todos los excesos sexuales imaginables.
Llevado a juicio, de Molay repudió la totalidad de la confesión y declaró enfáticamente que sólo lo había admitido para escapar de las sádicas máquinas que la Inquisición empleaba en los interrogatorios. Le volvieron a torturar, confesó nuevamente, y fue juzgado por segunda vez sin más alteraciones de su testimonio. En la pira de la ejecución, antes de que encendieran las llamas, reafirmó apasionadamente su inocencia y la de la Orden Templaría, denunciando a la Inquisición y a la Casa Real Francesa, y de acuerdo con algunas fuentes, murió gritando: Vekam, Adonai!:¡Venganza, Señor!, pero a todo esto la Orden de la Serpiente de Bronce, parte oculta de los Templarios no desapareció, sino que se traslado a Escocia.
VICTOR SALAZAR./ Caballeros de la Orden del Sol