Me preguntan muchas veces, que cual es mí criterio para decidir que fotografía elijo a la hora de escribir un nuevo artículo. Yo siempre me dejo guiar por el mismo, y es cuando veo una anacronismo en una dicha fotografía, es decir, cuando veo algo en una fotografía que según mis conocimientos actuales, no debería estar ahí.
Esta fotografía es un claro ejemplo, en ella observamos tres parejas de caballistas camino del Real de la Feria. Lo primero que nos llama la atención es que el entorno no es el acostumbrado a la hora de ver este tipo de imágenes...
Por los trajes deducimos que son flamencas que no rocieras. Todos los personajes secundarios están atentos al momento, las niñas que pasan por la calle, la señora que sale de comprar del establecimiento, esperen, ampliemos esa parte de la fotografía...
Sale de un comercio rotulado como La Delicia, con su bolsa en mano, pero lo importante es la rotulacion de la calle que aparece justo arriba, La Calle Bailen...Ya tenemos dos detalles que se salen de la normalidad actual del siglo 21, el primero son los caballistas por el centro de Sevilla, camino del Real de la Feria, situado en el Prado de San Sebastian. El segundo y más importante está estrechez que observamos a comienzos de la Calle Bailen, donde vemos un comercio de juguetes que hace esquina. Rápidamente caemos en en recuerdo de otra conocida vieja fotografía que nos da el enclave exacto donde fue tomada...
Efectivamente estamos cerca de la Plaza de la Magdalena, y nuestros caballistas están en el desaparecido cruce de calles que se producía entre la Calle Bailen con la desaparecida Calle Magdalena...
De la desaparecida Calle Magdalena pueden encontrar toda la información que deseen pulsando sobre el siguiente enlace: La desaparecida Calle Magdalena.
Como pincelada, recordar que esta calle fué derriba para el ensanche de la Calle San Pablo, y que a ella se accedía por un arco monumental al desaparecido Compás del Convento de San Pablo...Para nuestra desgracia, de esa Sevilla que vemos ha desaparecido todo, el viejo Compás, la Calle Magdalena, el caserío derribado para el ensanche que también albergaba la antigua capilla de la Hermandad de Monserrat, el pequeño comercio de barrio y lo más importante, los vecinos que daban vida a esas calles y que poco a poco fueron desplazados al extrarradio de la ciudad...