María cumplió un año el sábado. ¡Cómo pasa el tiempo! En ese año de vida nos ha regalado momentos muy bonitos, porque cada día que pasa está más preciosa, y a cambio ha ido recibiendo cositas del Atelier como su M o su varita.
Pensamos en casa en su regalo de cumpleaños y tenía que ser algo especial que de mayor le fuera algo muy muy sentimental, ¡somos nostálgicos en esta casa, no lo olvidemos!
Así que decidimos comprarle su primera sillita de madera. En Lleida tan sólo quedan dos sitios dónde poder adquirir sillas de madera hechas a mano en España, nada de importación. Así que allí fuimos y nos hicimos con ella. Además fue una compra genial porque el señor nos explicó toda la historia de esa silla y las diferencias con otras más prefabricadas. Finalmente nos quedamos la más artesana, la más próxima a nuestra tierra. Quería que fuera algo sencillo pero resultón y le hice un cubre-asiento en forma de granny que después tuve que coser haciendo la forma de trapecio. La lana escogida fue ECO de Lanas Stop una vez más, lo más esponjoso que podáis tejer, ¡os lo aseguro! Le puse unos lazos para unirlo a la sillita y que fuera fácil descoser para lavar y volver a poner. Y en los pies unos calcetines verdes para que María pueda mover la silla con toda la tranquilidad del mundo de no estropear el suelo. Parece que le gustó y a sus papis también. Si vierais las fotos de mi pequeña preciosa sentada en la silla, ¡se os caería la baba como a mí!