La petición apelaba a todos los Gobiernos presentes en la Cumbre a asegurar que todos los niños refugiados puedan ir a la escuela; que todos los refugiados tengan un hogar seguro; y que todos los refugiados puedan trabajar y contribuir con sus comunidades de acogida. De acuerdo con las cifras de la Agencia, nos enfrentamos a la más trágica serie de crisis de refugiados que hemos visto en décadas, que afecta ya a 65 millones de personas.
La sociedad española ha demostrado, una vez más, su enorme sensibilidad hacia el problema de los refugiados: España ha sido el país del mundo en el que mayor número de firmas se han recogido, más de 500.000. El Oriente quiso ser un colaborador activo de esta campaña difundiendo de manera ininterrumpida su contenido desde su activación hasta la celebración de la Cumbre, fiel al compromiso de la Masonería Española con los refugiados.
La Gran Logia de España ya expresó hace meses a Acnur y Cruz Roja la disposición de los masones españoles para contribuir a la acogida material de los refugiados. "Los masones de Gran Logia de España no podemos ni queremos permanecer insensibles o cruzados de brazos. Fieles a nuestra propia exigencia de ser buenos ciudadanos y personas solidarias, queremos contribuir a que encuentren una digna acogida quienes, sin apenas nada material, tienen que enfrentarse al exilio", decía nuestra declaración.
"Esta solidaridad global con los refugiados ha movilizado a miles de voluntarios y a gente corriente a acercarse y ayudar a quienes huyen de la guerra o la persecución. Sus acciones y sus voces han contrarrestado los mensajes de odio e intolerancia", explicó el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon al recoger las firmas.
Fuente: El Oriente