Es el inicio de la serie “Los crímenes de Kronberg”, que suma ya tres títulos. • Recupera literariamente al personaje de Sherlock Holmes, tan de moda en televisión. • Su heroína, Anna Kronberg, es una creación a la altura del famoso detective londinense. En el verano de 1889, cuando un cadáver con síntomas de la enfermedad del cólera aparece flotando en los depósitos de agua de Londres, Scotland Yard solicita la ayuda del doctor Anton Kronberg, el más eminente epidemiólogo del reino. Pero el riesgo de infección no va a ser su principal problema. Primero, porque hasta el lugar se ha desplazado un detective asesor de la policía llamado Sherlock Holmes, quien de inmediato descubre su gran secreto: Anton es en realidad Anna, y el engaño acerca de su identidad, caso de hacerse público, la llevaría a la cárcel. Pero, sobre todo, porque tras el caso se esconde una conspiración criminal que podría hacer tambalear los cimientos de la Inglaterra victoriana. Con el primer volumen de “Los crímenes de Kronberg”, la alemana Annelie Wendeberg no sólo ha logrado resucitar al mejor Sherlock Holmes, sino que ha creado a una heroína capaz de competir con él en sagacidad y fascinación.Os traigo el primer libro de la serie de Los crímenes de Kronberg. Una trilogía que tiene como protagonista a Anna y a nuestro querido Sherlock Holmes, ¿a qué suena muy bien? Hoy os traigo la reseña de La sonrisa del diablo.Cuando vi esa portada tan maravillosa en las novedades de Urano no me pude resistir y sabía que ese libro iba a pasar por mis manos, y así ha sido. Sin saber más que tenía una portada bonita, era una novela policiaca y que era una trilogía.
Así sin muchas más noticias me adentré en este libro. Lo primero que tengo que decir lo desconcertante de las primeras páginas. Nos hayamos con un prefacio de la autora en la que nos dice que lo que vamos a encontrarnos son unos diarios que encontró en una vieja casa que heredó. Ha cambiado los nombres, pero que la historia son los diarios de una mujer que vivió en la época victoriana.Estamos en el siglo XIX. El libro es narrado por una mujer, que se llama Anna Kronberg. Tiene una doble vida. Desde siempre quiere ser médico pero sabe que con la ley que hay eso sería imposible. Por ello ha ideado una idea magnífica y un tanto peligrosa: se hace pasar por hombre. Tiene una vida tranquila trabajando en un hospital; todos le admiran, le alaban como profesional. En su otra vida, es una señora que trabaja en el hospital como enfermera. Tanto su vida profesional y personal le sonríe, no puede querer más. Hasta que un día, como tantos otros, le llaman, al doctor Anton Kronberg (que así es llamado en su vida masculina), para acudir como médico bacteriólogo ante un horroroso crimen: hayan un cadáver en los depósitos de agua. Allí conocerá al que será su compañero de fatigas: Sherlock Holmes. Y desde ese momento, su vida dará un giro completo y ya nada volverá a ser igual.Aquí empieza la aventura de estos dos personajes para esclarecer los crímenes que van apareciendo en Londres. Tras los crímenes de Jack el Destripador ahora se presentan unos crímenes raros y crueles, con muchas dudas para todos. Sherlock será uno de los encargados en investigar el caso. Esto hará que tengan que seguir viéndose los dos a pesar de las reticencias de Sherlock.En el libro vamos a descubrir a Sherlock Holmes. No he tenido el placer de leer nada de él, pero he visto películas dedicadas a este singular detective. En el libro mediante la visión de Anna veremos como Sherlock toma nota de todo, no se le escapa nada, y como de la nada saca todo. Tan observador y perspicaz que asusta. Pero al mismo tiempo descubriremos que aunque sea así en su vida profesional, es todo lo contrario en su vida personal: anodino, impersonal. No sabe comportarse ante una perspectiva que se le escapa de las manos.Anna o Anton, como queramos llamarla, es una persona adusta en su trabajo, pero en su vida personal es más sociable y entrañable. Viviremos el miedo constante, el valor que tiene en una época donde la mujer era retraída en su casa, ella fue osada y decidió que seguiría adelante con su idea de ser médico. Me ha sorprendido gratamente esa osadía que presenta ante lo que se le presenta.Tengo que decir que el libro me ha parecido muy cortito. Al ser tan corto no he disfrutado tanto como podría ser si estuviera algo más esgrimido. No hay mucha investigación, ni mucha intriga, ya desde muy pronto podremos saber quién puede estar detrás de todo. Es un libro más que policial, de aventuras, tanto de los personajes como de la vida personal de Anna. Tiene una vida intranquila pendiente de si alguien reconoce su falsa identidad y su antiguo pasado. Un libro que creo que es preparatorio para los dos que restan. Aunque tenga un final, y resuelva a medias el caso que se presenta, seguiremos pendientes de este caso que hará que estos dos personajes sigan ligados por un tiempo.Otra de las cosas que he disfrutado mucho, es todo lo relacionado con la medicina de aquella época. Cómo por aquella época los médicos se las ingeniaban para intentar esclarecer todas las dudas de como funcionaban las enfermedades como el cólera o el tétanos. Nos daremos cuenta que leyendo estaremos reflexionando sobre ello y si creemos que hicieron lo correcto o no; o si quizás sobrepasaron algún límite.En resumen, una novela de detectives y aventuras en el que también el amor entra en juego; descubriremos a un Sherlock en distintas facetas de su vida, aparte de la investigación. Una bonita historia de valentía, coraje y valor de una superviviente de la época que con su entereza y heroísmo supera todos los obstáculos que en su vida se va encontrando. Viviremos la historia de unos crímenes inhumanos y salvajes que mediante la observación y obcecación de Sherlock y el arresto de Anna serán resueltos (o no). Si además os gusta la medicina os va a gustar mucho.
Gracias a Ediciones Urano por el ejemplar