La subcontratación como elemento imprescindible del emprendedor

Algunos de los emprendedores o personas que nos gusta ‘crear cosas’ nos encontramos con un problema enorme que juega en nuestra contra: queremos hacerlo todo. Un requisito básico para emprender y avanzar en cualquier aspecto de la vida es reconocer nuestras limitaciones y con ellas en mente, trabajar en mitigarlas o explotar nuestras grandezas, que son muchas. Reconocidas nuestras limitaciones, en el mundo de la empresa, tenemos varias opciones para solucionarlas o incluso explotarlas. Hoy vengo a hablaros la subcontratación o el outsourcing.

¿Por qué una empresa quería subcontratar?

Hay varios motivos por los que una empresa querría subcontratar, pero los siguientes son los más importantes:

• Para centrarse en el negocio crítico de la empresa
• Para reducir costes
• Acceso a expertos cualificados
• Para mantenerse por delante de la competencia desde una posición de liderazgo de mercado
• Para reducir/mitigar  riesgos
• Para abordar la transformación del negocio

Ejemplos básicos de subcontratación

La subcontratación no sólo se aplica a sistemas de producción, si no que se puede hacer la mayoría de las áreas de la empresa, las más comunes son:

• Sistemas financieros o contables.
• Área de marketing. Numerosas empresas se centran en proporcionar estrategias de marketing, una vez analizado el mercado en cuestión, los competidores, los clientes, los proveedores…
• IT. El área de informática es uno de los ejemplos más claros y comunes de subcontratación. Con sus pros y sus contras, hacer un outsourcing de IT es ‘sencillo’ y hay muchas compañías cuyo negocio es proporcionar este tipo de servicios. Ejemplos: Sermicro y Experis.
• Personal y sistemas administrativos. Junto con IT, es uno de los más fáciles de suministrar.
• Rercusos humanos. Aquí las empresas suele optar por una estrategia mixta, personal interno y personal externo de apoyo.
• Actividades secundarias. Estas actividades son las que no forman parte de las habilidades principales de la Empresa: vigilancia, limpieza, abastecimiento de papelería y documentación, eventos y conferencias. Un ejemplo claro de todos estos puntos es mantenimiento de Jardines en Madrid con Gongora.

En todos estos ejemplos se puede aplicar uno de los dos tipos de subcontratación:

• Total: La empresa que proporciona el servicio, se hace cargo completamente del mismo. Implica transferencia de equipos, personal, redes, operaciones y responsabilidades…
• Parcial: es una visión mixta y sólo se transferiría parcialmente algunos de los elementos anteriores.

Desventajas de la subcontratación

• La experiencia y conocimientos adquiridos al ejecutar los trabajos subcontratados quedan fuera de la empresa.
• La empresa subcontratada, al adquirir esta experiencia y conocimiento, se puede convertir en una competidora directa.
• Si la elección no es buena, o se descuida, la imagen de la empresa se puede resentir al asociarse directamente a la subcontratada.
• El compromiso de los trabajadores con la Empresa no es comparable al del personal interno.
• El inicio de un proceso de subcontración generará incertidumbre y estrés en el personal, afectando irremediablemente al rendimiento y bienestar de la empresa.
• En el sector o área subcontratada no se suele producir innovación, se puede decir que se centrarán en proporcionar el mínimo, satisfaciendo los SLAs acordados.
• Una mala gestión o estudio inicial puede implicar que el coste sea mayor del esperado.
• Esta es un poco ambigua, pero la Empresa que inicia el outsourcing pierde puestos de trabajos (ganándolos la empresa subcontratada).

Creo que hemos visto ejemplos más que suficientes en este artículos para al menos considerar, en la pequeña y mediana Empresa (en grandes empresas es imprescindible), la opción de subcontratar aquellos servicios que no nos proporcionan valor y o que nos permiten invertir el ahorro en lo que realmente importa.

¿Vosotros qué opináis de la subcontratación?