Hoy en día cualquier usuario “Linux-based” tiene su suite preferida al momento de elaborar documentos de texto, presentaciones y/o planillas de cálculo.
Las distribuciones de Linux incoporan generalmente alternativas open source de producción viables para realizar funciones ofimáticas, sin nada que envidiar a su mayor competidor privativo, (AKA Microsoft Office).
La primera opción en nuestras mentes, además de ser la mas popular es LibreOffice, el fork de OpenOffice desarrollado durante la venta (y posterior abandono) de Sun a Oracle. Con una enorme comunidad entregando soporte y nuevas versiones, fundando además la organización “The Document Foundation” que promueve la utilización de software de código abierto para el manejo de documentos.
Hoy en día existen además alternativas para utilizarse en el navegador, tales como Google Docs, Office Online, Zoho Docs entre otras.
Si nos referimos al escritorio, existen otras alternativas de diversa consideración:
- WPS Office, privativo y sin soporte a los documentos ODF (Open Document)
- OpenOffice, el “hijo abandonado” de Oracle, entregado a la fundación Apache, con un dudoso futuro pero aun disponible para su descarga y uso.
- Calligra, la suite realizada con las librerías gráficas QT y originalmente diseñadas para entornos KDE
- Y OnlyOffice, la suite que recientemente se “convirtió” al Open Source.
OnlyOffice para escritorio
OnlyOffice es una aplicación ofimática de trabajo para documentos, hojas de cálculo y presentaciones, tanto para entorno colaborativo (online) como para escritorio. Si bien esta suite multiplataforma no es nueva, ha comenzado a ser Open Source (Licencia AGPL v3) desde hace el 17 de octubre del 2016. Aunque hay que tener en cuenta que no todo lo que brilla es oro, ya que sólo la versión de escritorio ha sido liberada como código abierto.
Posee soporte para documentos de MS Office y del tipo OpenDocument, y su interfaz gráfica ha recibido buenas críticas en cuanto a la usabilidad por parte de la comunidad. Otro aspecto a considerar es que casi todas las funciones “online” que incorpora la suite, sólo se encuentran en las versiones de pago orientadas a trabajo en servidor y que no comparten la filosofía Open Source.
Cabe destacar que recién comienza el proceso migratorio al código abierto y como tal, se encuentran algunas quejas por partes de los usuarios tales como no poder compilar OnlyOffice o documentación confusa dentro de los repositorios de GitHub.
Ahora sólo cabe preguntarse, ¿le darías la oportunidad a esta suite en tu distribución?