Elizabeth Sparkle (Demi Moore), una actriz en decadencia, y rodeada de miedos e inseguridades, parece haber encontrado la solución a sus problemas cuando descubre “La Sustancia”, un producto milagroso que le permite crear un alter ego, Sue, (Margaret Qualley) que es la versión mejorada de sí misma: más joven, más hermosa, más perfecta. Lo único que tienen que tener en cuenta es el equilibrio entre la protagonista y su alter ego. Si esto se rompe, podría traer consecuencias graves.
Con una interpretación sublime tanto de Demi Moore, demostrando que sigue todavía muy en forma, como de Margaret Qualley, esta cinta combina el body horror, con toques gore en un discurso feminista sobre la hipersexualización de la mujer y la explotación del cuerpo femenino así como el miedo a envejecer y al rechazo. En una sociedad tremendamente crítica con la imagen de la mujer, "La Sustancia" se pone en el extremo para denunciar hasta dónde llega la presión que se ejerce desde distintos sectores, más aún en el entorno audiovisual.
Cabe destacar el papel de Dennis Quaid en el rol del productor llamado Harvey. Un hombre sin escrúpulos, repulsivo y desagradable que no hace más que enfatizar el rol femenino de la cinta. Lo inquietante es pensar en que personajes como éste puedan existir en realidad.
Sin lugar a dudas, "La Sustancia" es y ha sido la mejor película vista en el festival. A pesar de sus 140 minutos, un tanto larga para mi gusto, es atrevida, con ritmo y a ratos desagradable. Tendré la suerte de poder disfrutarla nuevamente en el Molins Horror Fest, y ahí estaremos de nuevo para revisitarla y gozarla. En definitiva, una película disfrutona en todos los sentidos que dará que hablar en este 2024.
La película está en cines desde el pasado 11 de Octubre. No os la perdáis.
Mi puntuación: 8/10
David Sanmartí
@ddsanmarti
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