Aunque la receta original la denomina como tarta, para mi el resultado es algo intermedio entre tarta y pudding de manzana, ligera, suave, deliciosa y sin gluten, apta para celiacos.
La califican de la tarta de manzana más fácil del mundo y lo es. Si a alguien se le resiste esta receta es que definitivamente no está hecho para la cocina… fin, se acabó, a buscar otro hobby u otra profesión, porque consiste en batir unos ingredientes y saber pelar y cortar unas manzanas. :P
Como os decía, el resultado final, al no llevar ninguna masa o base y la mezcla que une las manzanas es más bien de lácteos, recuerda más a un pudding, a un pan cake o tortita y si me apuráis a una tortilla española dulce, que a una tarta.
Me ha encantado este postre, por lo fácil y también por el sabor, espero que os guste, besazos!
Receta de la Tarta (pudding) de manzana más fácil del mundo (sin gluten)
Ingredientes:
– 3 huevos
– 120 azúcar
– 45 g de Maizena
– 40 g de almendra molida
– 2 cucharaditas esencia de vainilla o azúcar vainillado
– 200 ml de nata para postres
– 175 ml de leche
– 3-4 manzanas grandes (tiene que quedar el molde lleno, las mías eran mezcla de golden, gala y granny smith, lo que quedaba en el frutero)
– azúcar para espolvorear
– un puñado almendras laminadas
– azúcar glass para espolvorear
Elaboración:
– Precalentar el horno a 175ºC.
– Forrar un molde con papel vegetal o aceitarlo si es molde tipo ‘pie americano’.
– En un bol grande batir los huevos con el azúcar, añadir la Maizena, la almendra molida, la esencia de vainilla y batir. Añadir los lácteos, la nata líquida para postres y la leche y batir todo bien. Reservar.
– Pelar y cortar las manzanas en láminas y echarlas en el molde que tenéis ya preparado.
– Echar encima la mezcla líquida, si veis que es mucho desechar un poquito, ya que se tienen que ver un poco las manzanas, no debe quedar cubierto.
– Echar las almendras en láminas por encima y espolvorear con azúcar.
– Hornear a 175ºC durante por lo menos 1 hora 15 min. A los 40 minutos o así es posible que tengáis que poner un papel de aluminio encima para que no se queme la parte de arriba, yo tuve que hacerlo. Lo ponéis y seguís horneando hasta el final.
– Aseguraros de que está bien hecha la tarta pinchando con un palillo y viendo si este sale seco, si no es así, seguir horneando, aunque ya haya pasado la hora y cuarto. La textura debería ser la de una tortilla de patatas bien cuajada.
– Cuando esté hecho, sacar del horno y dejar enfriar sobre una rejilla y después en la nevera. Tendréis que esperar a que se enfrié por completo si no no podréis cortar raciones como de tarta.
– Espolvorear con azúcar glass y servir tal cual o con un poco de helado de vainilla.
Fotos: delikatissen
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