La tauromaquia como enfermedad mental.

La psiquiatría debería clasificar entre sus nuevas  patologías el gusto desmedido por el dolor de un animal inocente y disfrutar viéndolo sufrir hasta morir, suena un poco sadico lo que estoy escribiendo, pero es la triste realidad, La ley 916 de 2004 reconoce la tauromaquia como una actividad cultural, pero quienes se benefician con esta actividad, una cada vez mas pequeña minoria que sufre de esta especie de "sadismo" disfrazado de arte.

Hoy en Bogota se discute la viabilidad de la realización de una consulta popular en la que sea el pueblo quien decida si quieren o no corridas de toros en esa ciudad, mi pregunta es ¿en Cali cuando?,cuando daremos un buen uso a la plaza de toros de esta ciudad, al igual que la aberración de utilizar caballitos para cargar pesos que en su mayoría sobrepasan el suyo propio ha sido un tema aplazado en su discusión por la alcaldía y el consejo, quienes seguramente seran visitantes asiduos de las corridas de toros en diciembre, compraran sus bonos desde septiembre para enseñarles a sus  hijos lo que es el maltrato y el desprecio por todo ser viviente.El señor Pepe Manrique como presidente de la asociación de toreros de Colombia, señala que de este negocio dependen 20 mil personas, entonces en vez de hacerle caso a estas estupideces, dignifiquemos el trabajo de nuestros vendedores ambulantes y demás trabajadores informales de cuyo trabajo dependen millones de colombianos, legalicemos y aceptemos el trabajo de sicarios, corruptos, estafadores de cuyo trabajo dependen otro tanto.En un país tan lleno de violencia, cuyos hechos vemos a diario no solo en los noticieros sino en nuestra vida diaria, tan siquiera considerar la tauromaquia como cultura es un despropósito, entonces también aceptemos como cultura el narcotrafico, la prostitución y demás oficios por los cuales somos mas reconocidos en el mundo, que por lo diestros de nuestros toreros

Luzmar Arboleda