Deporte y grandes audiencias son una pareja inseparable en televisión, pero los grandes eventos deportivos están llamados también a ser también el verdadero motor que impulse otras formas de disfrutar de la pequeña pantalla, como las emisiones tridimensionales, una de las esperanzas de la industria para animar el mercado en tiempos de crisis. Así se desprende de un estudio sobre la televisión en 3D realizado por la consultora internacional Screen digest para Panasonic, que concluye que casi el 80% de los canales proyectados para este año con emisiones tridimensionales incluyen contenidos deportivos.
Es más, de un total de 39 proyectos comerciales, incluyendo los que emitirán en pruebas, 24 tienen al deporte como contenido único, y 15 se circunscriben a un sólo gran acontecimiento, como el torneo de Roland Garros o el Mundial de Suráfrica.
Sin embargo, la televisión en 3D tiene un gran inconveniente, y más en tiempos de crisis: su elevado coste, ya que según el estudio, hacer televisión en 3D es un 20% más caro. Esto, unido a que la mayoría de los usuarios acaban de hacer un desembolso para adaptarse a la televisión digital y a la llegada de la alta definición, puede zancadillear la introducción de la señal en 3D en los hogares.
Así, pese a la "explosión tecnológica" que vive la televisión tridimensional, su llegada al hogar "es muy complicada hoy por hoy", según el profesor de Ciencias de la Comunicación Alfonso Cuadrado, de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid. A su juicio, en el actual escenario de crisis, tras la adaptación a la TDT y dadas la escasa producción en 3D y el elevado precio de los televisores preparados, estas emisiones sólo funcionarán como una "experiencia especial" asociada a eventos en cines y bares.