Dime una cosa: ¿Te consideras más listo que los demás? ¿Un poco más “espabilao”? ¿O te pasa al contrario? ¿Admiras a otros por su inteligencia y te gustaría ser como ellos? Bueno, pues si respondes afirmativamente a alguna de estas preguntas (aunque solo sea en tu interior), te informo de que probablemente estés equivocado.
Eso es, al menos, lo que alega la teoría de las 9 inteligencias. Esta forma de ver el intelecto humano no solo ayuda a democratizar la sociedad, sino que también nos muestra maneras efectivas de enseñar y de aprender. ¿Te gustaría saber cómo?
Las inteligencias múltiples
Según el psicólogo e investigador norteamericano de Harvard, Howard Gardner, existen varios tipos de inteligencias. No es el único ni el primero en presentar esta teoría, pero quizás sí el que la ha hecho famosa, y la ha concretado. Algo estaba claro, todas las personas eran muy buenas en algo, pero no en todo.
Después de muchas pruebas y experimentos, se ha llegado a la conclusión de que la inteligencia se puede dividir en varias categorías principales.
1. Inteligencia espacial o visual
Es la inteligencia que nos permite interactuar y entender el entorno espacial y/o tridimensional. La persona con este tipo de inteligencia es capaz de percibir el mundo a su alrededor en imágenes. Arquitectos, diseñadores gráficos… usan este tipo de inteligencia.
Algunas características de las personas con este tipo de inteligencia son:
- Perciben el entorno de forma visual.
- Reproducen lo que ven en pinturas y dibujos.
- Visualizan en la mente.
- Diferencian colores, ubicaciones, formas y tamaños.
2. Inteligencia lingüístico-verbal
Es la del lenguaje y de la palabra. No es solo verbal, sino que se refiere a la capacidad de comunicarse, sea por escrito o hablando como un loro. Bueno, mejor que un loro. De hecho, manipulan la palabra como si de un puzzle se tratara. Es una inteligencia que se desarrolla en campos como la escritura o el periodismo.
Algunas características de las personas con este tipo de inteligencia son:
- Captan información de forma sencilla por vía oral y escrita.
- Son capaces de transmitir de forma efectiva las ideas.
- Aprenden nuevos idiomas con más facilidad que el resto.
- Tienen un vocabulario amplio.
- Se interesan por la relación entre palabras, sus matices y orígenes.
- Detectan rápidamente los fallos ortográficos y gramáticales.
- Disfrutan de leer y escribir.
- Son mejores oyentes y escuchan con atención.
3. Inteligencia lógico-matemática
Tiene que ver con la capacidad analítica de resolver problemas, ecuaciones numéricas y comprensión de símbolos y conceptos abstráctos… Normalmente, es a estas personas a las que consideramos inteligentes, y a las que la sociedad tradicional premia.
Algunas características de las personas con este tipo de inteligencia son:
- Entienden bien conceptos como cantidad y tiempo.
- Tienen habilidad para encontrar soluciones lógicas de forma rápida.
- Resuelven operaciones matemáticas sin dificultad.
- Disfrutan de analizar acertijos y ecuaciones numéricas.
- Son capaces de formular diferentes teorías para la resolución de un problema, aunque no suelen ser opciones creativas, sino siempre lógicas.
- Aplican sistemas, métodos y procesos a las tareas que realizan.
- Son personas organizadas y ordenadas en general, y disfrutan de planificar sus tareas.
4. Inteligencia kinética-espacial o kinestésica
Es parecida a la primera, pero tiene que ver más con nuestro cuerpo y sus movimientos. Es fundamental en los deportes y en la danza. Aunque yo personalmente sea incapaz de verlo, estas personas legan a expresar ideas con su cuerpo.
Algunas características de las personas con este tipo de inteligencia son:
- Exploran el entorno mediante el tacto y el movimiento.
- Tienen buena coordinación, equilibrio y ritmo.
- Disfrutan de tareas en las que haya movimiento, así como del ejercicio físico.
- Tienen un buen empleo de la motricidad fina y gruesa.
5. Inteligencia musical
Es la capacidad de entender o apreciar la música, así como expresarla o interpretarla. Vamos… lo que toda la vida hemos llamado “tener oído”.
Algunas características de las personas con este tipo de inteligencia son:
- Son capaces de percibir y de expresar armonías musicales, incluso sonidos leves y matices.
- Memorizan con facilidad canciones, entonaciones y ritmos.
- Detectan rápidamente la falta de afinación o de armonía.
- Aprenden rápidamente a tocar nuevos instrumentos musicales.
- Disfrutan de la música y prestan atención a la letra de las canciones.
6. Inteligencia interpersonal
Interpersonal… entre personas. Es decir, saber relacionarnos con los demás, entenderlos teniendo en cuenta sus circunstancias. Otro clásico: “don de gentes”. Los buenos psicólogos también necesitan este tipo de inteligencia. Saben leer a los demás, lo cual es una ventaja enorme para poder actuar después.
Algunas características de las personas con este tipo de inteligencia son:
- Se comunican de forma efectiva, tanto de forma verbal como no verbal.
- Son capaces de empatizar con diferentes tipos de personas.
- Disfrutan de la responsabilidad que conlleva dirigir equipos de trabajo y otros tipos de liderazgo.
- Establecen nuevas relaciones sin dificultad.
- Disfrutan de relaciones más profundas y duraderas.
7. Inteligencia intrapersonal
Ésta es el conocimiento de uno mismo, de su persona y de sus emociones. Y no es tan sencillo como parece. La mayoría de las personas no saben quiénes son. Haz la prueba. Pregunta a alguien quién es, y seguramente te responderá con su nombre, sus antecedentes, o su trabajo. Pero el yo interior es algo más profundo que eso.
Algunas características de las personas con este tipo de inteligencia son:
- Tienen una elevada capacidad de autodisciplina y autocontrol.
- Entienden sus limitaciones en cuanto a conocimiento y capacidades.
- Comprenden la importancia y alcance de sus acciones.
- Disfrutan del presente, y son capaces de realizar ejercicios de introspección profundos.
- Tienen una autoestima equilibrada.
8. Inteligencia naturalista o medioambiental (se añadió en 1995)
Sobre el entorno natural. Es la habilidad de observar la naturaleza y el medio ambiente como si de un cuadro se tratara, llevándonos a reflexiones sobre lo que vemos. Son estas personas que van por el campo y te van diciendo qué pajarito es ese, qué planta es y para qué sirve…
Algunas características de las personas con este tipo de inteligencia son:
- Son sensibles a la naturaleza y se sienten en contacto con ella.
- Se preocupan por los efectos de sus acciones y de las de otros en el medio natural.
- Tienen la capacidad de explorar el entorno y percibir los detalles.
- Sienten empatía por otros seres vivos.
- Son capaces de clasificar y diferenciar las diferentes especies de fauna y flora.
9. Inteligencia existencial
¿Por qué existimos? La gran pregunta. Esta inteligencia nos permite tener metas de vida, fines o propósitos más elevados que pasarlo bien el próximo fin de semana. Por supuesto, implica un compromiso igual de trascendente. Si quieres puedes quitar existencial y poner espiritual.
Algunas características de las personas con este tipo de inteligencia son:
- Son capaces de hacerse preguntas profundas y llegar a conclusiones lógicas sobre temas trascendentes como el origen de la vida o el sentido de la misma.
- Diferencian entre asuntos vitales y otras acciones prescindibles.
- Perciben en cualquier entorno valores universales como la justicia o la honestidad.
- Tienen un elevado sentido de la honestidad y son consecuentes con sus valores.
- Se interesan por aprender conceptos existenciales y espirituales.
- Cuidan su existencia, y ayudan a otros a mejorar sus vidas.
Un par de notas: la 9ª inteligencia no suele aparecer en los tests y en muchos listados de las inteligencias múltiples; además, el equipo de Howard Gardner y su equipo de la Universidad Harvard han identificado doce tipos distintos de inteligencias. Hemos puesto 9 porque se conoce a esta teoría como teoría de las 9 inteligencias.
Teoría
Una cosa curiosa. Este señor, presentó su propuesta en un libro publicado en 1983. ¡Sí! Hace una tira de años. Lo triste es que, por mucha lógica que tenga su teoría, seguimos sin aplicarla. En los colegios se sigue enseñando de la misma manera. Ya hablamos en el post de “trabajar sentado” de por qué el método tradicional de la educación está muy muy muy… desfasado.
Hay que decir que esta teoría ha sido muy criticada. También ha tenido apoyos. La verdad es que el concepto de inteligencia es muy complicado de definir de forma científica.
Más allá de su respaldo científico, ¿qué opinas tú? ¿Te has visto reflejado en algunas de estas inteligencias? ¿En más de una? ¿Crees que es posible diferenciar tipos de inteligencia? ¿O más bien son características comunes en todo ser humano? Si quieres, puedes hacer algún test que hay por internet. Aquí te dejo un enlace que está curioso: Test de inteligencia múltiple.
Eres un crack
Sea como sea, creo que coincidirás conmigo en que de toda la vida, ha habido personas a las que se les da muy bien hacer unas cosas, pero no otras. ¿Son más inteligentes unos que otros? ¿Es menos inteligente Michael Jordan que Einstein? Para muchos sí, pero lo cierto es que los dos fueron personas que consiguieron éxito y reconocimiento.
Da lo mismo que bailes, que toques el piano, que seas un crack como orador, escritor o que aprendas idiomas casi sin querer… ¡eres inteligente! ¡tienes un cerebro asombroso! Es muy injusto, tu inteligencia no va a salir en un test de CI (Coeficiente intelectual). Este tipo de pruebas suelen premian a los que tienen inteligencia matemático-lógica y lingüística. Pero da igual, no lo hagas y una cosa que te ahorras.
Lo importante es lo que haces con tus virtudes, no que te pongan una cifra como si fuera un código de barras, ni que te clasifiquen con un tipo de inteligencia.
Como aplicar con efectividad la teoría de las inteligencias múltiples
Vale, seamos efectivos… ¿de qué nos sirve saber esto de las inteligencias múltiples?
Pues para empezar, para sentirnos bien. El saber que cada persona es distinta, pero más o menos igual de inteligente, nos lleva a una conclusión muy interesante. No somos mejores o peores porque se nos de bien una u otra cosa. Sencillamente, somos distintos. Y esto es algo maravilloso.
¿Te imaginas que a todos se nos diese bien la música? ¿Que al mismo tiempo a todos nos gustara escuchar música? Mucho ritmo, pero… ¿quién lo comentaría? ¿la bailaría alguien? ¿o la dibujaría? ¿quién nos daría un abrazo mientras escuchamos nuestra canción favorita? ¿alguien entendería la letra? Y así podríamos seguir, con este ejemplo y con muchos otros. Sí, la diversidad de inteligencias consigue que disfrutemos de relacionarnos con otros y que disfrutemos de la vida, en buena medida.
No somos mejores o peores porque se nos de bien una u otra cosa. Sencillamente, somos distintos. Y esto es algo maravilloso.
Por otro lado, la teoría de las inteligencias múltiples nos lleva a aprovechar mejor nuestro aprendizaje. ¿Cómo?
Primero, se consciente de qué se te da bien y qué no se te da tan bien. ¿Para qué te va a servir eso? Bueno, fácil. Enfócate en lo que se te da bien y aprovéchalo para aprender al máximo a la vez que disfrutas. Al mismo tiempo, intenta mejorar las habilidades que no tienes, pero no las uses de momento para aprender.
Un ejemplo práctico para aprender
Imagina que quieres aprender las tablas de multiplicar de memoria.
¿Qué inteligencia tienes? ¿La lógico-matemática? No hagas nada más. Pero lo más probable es que no sea tu caso. De hecho, es una minoría de gente la que disfruta de la inteligencia “medallista” ganadora en los test de CI.
Así que vamos a poner que tu inteligencia sea musical. ¿Podrías inventar una canción para aprenderte las multiplicaciones? Es tan sencillo como leer toda la tabla dándole ritmo. Siii, ya lo se… está inventado. Basta con buscar en Youtube y te aparecen cientos de cancioncitas con las tablas de multiplicar.
Vamos a complicarlo: Tienes la inteligencia lingüística. Pues escribe la tabla tú, en vez de leerla o ver la que han hecho otros. ¿Eres más de dibujar? Coge tu dibujo, y explícaselo a un amigo. ¿Que tienes la inteligencia kinestésica? Dibuja la tabla en el suelo, y repítela mientras saltas de un cuadrado a otro. ¿La existencial? Plantéate para qué vas a usar esa tabla, imagínate utilizando los cálculos en diferentes situaciones.
Claro, es cuestión de echarle imaginación. Aunque como siempre, en internet puedes encontrar técnicas de todo tipo para cualquier cosa que se te ocurra.
Cómo enseñar usando las inteligencias múltiples
Una de los grandes beneficios de esta teoría es su aplicación a la enseñanza.
Saber que podemos aprender de diferentes formas nos debe servir para enseñar el mismo concepto de maneras distintas. Es probable que estés pensando en tu maestro de escuela (eso de “maestro” ha sonado muy antiguo). O quizá tu mismo eres educador. Pero en realidad, esto nos sirve a todos. Los que somos padres, por ejemplo. Cuando queremos ayudar a un amigo a resolver un problema. Cuando nos toca presentar un proyecto, o dar un discurso, etc.
La idea es que enseñemos lo mismo, pero de varias maneras a la vez. Imagina una clase de inglés. Queremos enseñar la conjugación de un verbo… pues usa varias técnicas a la vez.
- Primero escribe la conjugación y pide que los alumnos hagan lo mismo.
- Después explica un cuento sobre cómo se inventó la conjugación; compara la forma verbal con otros idiomas.
- Usa fotografías de la naturaleza para cada forma del verbo; pide a cada alumno que diga una frase con alguna de las conjugaciones.
- Ahora, di tu una conjugación, y sin hablar, sólo con gestos, que un alumno señale a quién se refiere (él, tu, nosotros…)
- Numera la lista, pon en diferentes colores las letras que van cambiando.
- Pide a los alumnos que hagan preguntas de lo que no entiendan.
- Después canta una canción con una conjugación completa, y que la bailen.
- A continuación, pide a los alumnos que se levanten y que expliquen lo aprendido a otro compañero mientras caminan.
- Unos minutos después, coge una pelota y lánzala a un alumno. Que este diga la primera persona. A su vez, este tira la pelota a otro compañero, que dice la segunda persona, y así un rato.
- Para finalizar, que cada alumno se haga un dibujo tipo mapa mental de la conjugación.
La combinación de diferentes métodos para enseñar un mismo contenido es muy efectiva
Igual se te ocurren otras ideas, pero el tema está claro. Y… dime la verdad… ¡¿no es brutal?!
En una clase has conseguido enseñar lo mismo desde varios puntos de vista. A un alumno le ayudará más la canción, a otro, el dibujo. Al mismo tiempo, estás ayudándolos a ser conscientes de sus mejores habilidades mientras potencias las debilidades. Desde luego, ¡una clase así no se olvida! Qué pena que empezamos imaginando. Pero… ¿podrías ponerla en práctica? ¿podrías usar varios métodos cuando hables en público? ¿cuando enseñes a tus niños?
Resumiendo
Para concluir, me gustaría hacer referencia al origen de la palabra inteligencia. Es bastante interesante. La palabra original viene del latín, y es intelligentia. Primero, esta “inter”, que es entre. Después, “legere”, que es escoger, separar o leer. Así que inteligente es aquel que escoge la mejor opción de entre varias; el que lee entre líneas. Hay una diferencia entre intelectual e inteligente. El intelectual es el que tiene la cabeza llena de datos (“un coco”). Pero inteligente es el que practica y vive lo que sabe. ¿Quién serás tú? ¡Recuerda! «To er mundo es listo»
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Publicado por: EfectiVida - Efectividad, organización, productividad y desarrollo personal