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Ya había mencionado anteriormente en otro articulo relacionado, la mediocre teoría del villarato que al parecer, su mentor Alfredo Relaño, está intentando enmascarar o suavizar ante los acontecimientos sucedidos en las últimas jornadas de Liga. El periodista iluminado asegura que las tornas han cambiado, que su teoría se está diluyendo ya que, textualemte, “Abusar demasiado de las influencias hace que éstas se gasten”. Es decir, que según Relaño esta teoría tiene caducidad, pero este es mi análisis acerca de su caducidad:
La realidad es que cuando todo esta basura salpicó al F.C.Barcelona a causa de las rabietas ocasionadas por la frustración que les suponía ver ganar títulos al equipo de Rikjaard y Ronaldinho, Relaño y sus secuaces no eran conscientes de la magnitud que la misma podía ocasionar. Lo que empezó con unos argumentos en contra de Villar acabarían siendo mentiras encaminadas a desprestigiar las victorias del Barça ocasionadas por errores arbitrales según ellos premeditados.
¿Que sucede ahora? Sucede que después de ver como el resto del mundo alaba el juego y los títulos culés y observar como para los que no comulgan con sus argumentos derrotistas, su teoría es simplemente una payasada, a parte de todo eso, resulta ahora que los errores arbitrales ya no favorecen al Barcelona, es más aún ¡Favorecen al R.Madrid! ¡Vaya! Relaño se ha metido en buen lío, su credibilidad como periodista desapareció el mismo día que comenzó a escribir estas mentiras pero es que ahora su desprestigio y hundimiento me recuerda a los últimos días de Hitler escondido en su bunker y envuelto en mil paranoias más.
Relaño, hiciste el ridículo y ahora justificas todas esas lineas llenas de rencor diciendo que la teoría del villarato se está acabando para el Barcelona porque está abusando demasiado de Villar. ¿Pero que nos estás contando? ¿Es posible que ni siquiera tu mismo te creas esas palabras? Me asombra observar como los medios de comunicación manipulan los acontecimientos tan libremente sin estudio ni el aporte de pruebas necesario para demostrar tantas falacias, me asombra también como un supuesto profesional puede llegar a venderse de esta forma y ensuciar su imagen de tal manera.
Relaño y seguidores del villarato: los árbitros, como estáis observando, se equivocan por diferentes motivos, unas veces perjudican y otras favorecen pero me niego a pensar que es de manera premeditada porque el número de pruebas que me habéis aportado para creer en eso es cero. No nos insultéis más ni a nosotros los aficionados, ni al fútbol.