La transparencia dejó expuesta a ATE Neuquén y Quintriqueo con menos poder

ATE Nación garantizó las elecciones que el secretario general local no quería, y las urnas le propinaron otras dos derrotas.

Más allá del continuo y cada vez más notorio deterioro de imagen que -a fuerza de violencia y desaciertos- se autoinfligió el secretario general de ATE Neuquén, Carlos Quintriqueo, hay un factor fundamental que explica sus recientes derrotas en dos de las seccionales más importantes y es la transparencia del acto eleccionario.

A eso se refirió el presidente de la Confederación Latinoamericana y del Caribe de Trabajadores Estatales (Clate) y dirigente de ATE a nivel nacional, Julio Fuentes, quien también explicó que Quintriqueo intentó que no se votara. Pero los recursos administrativos y judiciales que había presentado para gambetear a la democracia no prosperaron y también en esos terrenos masticó la derrota.

El jueves, cinco seccionales fueron a las urnas para elegir conductores. La oposición (Verde Anusate) ganó tanto en la de Senillosa, Arroyito y Villa El Chocón como en la de San Martín de los Andes, donde lo hizo por paliza (758 a 327 votos); mientras que sumadas las cinco la diferencia fue de apenas 136 votos, lo que marca un indisimulable retroceso de Quintriqueo, cuya patota volvió a recurrir a la violencia, como lo hace en sus infructuosos intentos de amedrentar (con hostigamientos concretos) a las autoridades de este multimedios del que forma parte Mejor Informado.

Tras los resultados electorales del jueves, Fuentes expresó sus deseos de que "el proceso democrático sea lo común de aquí para adelante"; y agregó que en los comicios anteriores "no pudieron participar los fiscales, las urnas eran un desastre y la gente trabajaba en Neuquén pero votaba en Arroyito". Señaló que cuando mediaba Quintriqueo, los actos eleccionarios eran "un caos" pero esta vez, "gracias a los veedores y a la junta electoral nacional" del gremio, los resultados reflejaron la tendencia que se va profundizando.

Fuentes adelantó que en 2023, cuando se vote para renovar la comisión directiva de ATE Neuquén, también va a extremar esfuerzos para que se garantice la transparencia. Subrayó, además, la posibilidad de que el gremio dé una vuelta de página y tenga "una comisión directiva que se anime a plantear los problemas que tienen los trabajadores de la administración pública neuquina".

Hoy Quintriqueo carga sobre sus espaldas la acusación de "carnero" que acreditó durante la protesta de los autoconvocados de la Salud Pública.

Fuentes señaló que uno de los factores que contribuyeron al retroceso y a la pérdida de poder de este dirigente fue, precisamente, el hecho de "no haber asumido la representación de los trabajadores de la Salud que son afiliados a ATE". Otro de los factores que concluyeron en este presente de derrotas es, sin dudas, la violencia que caracteriza a su gestión cada vez más alejada de los derechos y obligaciones de la vida en democracia. De hecho, tiene en su prontuario causas judiciales por robo y usurpación en las instalaciones de tres radios del grupo Prima Multimedios. El ataque al derecho constitucional a informar y ser informado es otro de sus rasgos característicos.

Luego de aquella vez en que se vio literalmente desbordado por las bases (expresadas en los autoconvocados de Salud, luego elefantes, que no aceptaron su arreglo salarial), Quintriqueo asistió a una aceleración constante de su declive y, naturalmente, siguió bajando escalones.

En diciembre perdió la Junta Interna del Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS) y ni siquiera tuvo gente para armar una lista en el hospital de Cutral-Co y Plaza Huincul. Ahora recibió este castigo en las urnas que la oposición interpreta como un preanuncio de lo que puede llegar a venir: el cambio de nombres que traerá un cambio de rumbo en la conducción provincial. Por lo pronto, está claro que la transparencia lo dejó expuesto. (mejorinformado.com)