ATENAS(Reuters) - Los inspectores de la UE, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Central Europeo (BCE) dieron el martes una tibia aprobación a un tramo de ayuda vital para Grecia, diciendo que pese a cierto avance fiscal Atenas se retrasaba en las privatizaciones y las reformas estructurales necesarias para salir de su crisis de deuda.
Los inspectores de la organización conocida como la troika, dijeron en un comunicado conjunto que probablemente se pondría a disposición en noviembre un tramo de 8.000 millones de euros que Grecia necesita para evitar una quiebra inminente, después de la aprobación de los ministros de Finanzas de la zona euro y del FMI.
"Es esencial que las autoridades pongan más énfasis en general en las reformas estructurales en el sector público y en la economía", dijeron los inspectores en el comunicado.
Los líderes europeos están inmersos en la consecución de un segundo paquete para Grecia de 109.000 millones de euros acordado en julio para tratar de evitar que la crisis griega se extienda fuera de control, después de que una ayuda anterior de 110.000 millones de euros se haya mostrado insuficiente.
"Fue una decisión política, no una decisión que tomaron expertos o economistas. No están preparados aún para arriesgarse a quitar el enchufe a Grecia", dijo Joerg Kraemer, un economista de Commerzbank con sede en Francfort.
Los inspectores dijeron que el éxito del programa dependía del sector privado y la financiación pública para el segundo programa.
Después de que Grecia admitiese que no alcanzaría sus objetivos de déficit para este año, ha habido crecientes dudas sobre si el segundo rescate planeado será suficiente.
A la troika le llevará al menos una semana dar un informe completo a los ministros de la UE y el consejo del FMI tomará la decisión final sobre la ayuda. Grecia tiene efectivo hasta noviembre y se enfrenta a vencimientos de bonos por casi 3.000 millones de euros en diciembre.
OBJETIVOS INCUMPLIDOS
Los inspectores confirmaron que Grecia no alcanzará sus objetivos de déficit para 2011 debido a una recesión más dura de lo previsto, pero también a la falta de implementación de las medidas previstas. Añadieron que una aplicación rigurosa de las medidas adicionales debería ser suficiente para alcanzar las metas para 2012.
Pero dijeron que sería necesario apretarse más el cinturón para alcanzar los objetivos de 2013 y 2014.
"Es esencial que esas medidas se centren en el lado del gasto", dijeron, repitiendo su mensaje de que Grecia debe reducir su sector público más que mantener subidas de impuestos para recortar el déficit.
Grecia, en una fuerte recesión y en lucha para contener una deuda pública que se espera que alcance el 162 por ciento del PIB este año, ha prometido medidas de austeridad, incluidos unos fuertes recortes salariales para muchos funcionarios, despidos en masa y subidas de impuestos que afectarán con fuerza a la clase media griega.
El martes, los funcionarios bloqueaban oficinas de contabilidad general y del Ministerio del Interior, ondeando pancartas que rezaban "Arruinados y despedidos" y "No a los despidos, no al recorte salarial". Miles de funcionarios avanzaban hacia el Parlamento.
En algunos lugares de Atenas, la basura se acumulaba en las calles debido a que una huelga de los empleados de limpieza, mientras que los trabajadores de la mayor refinería griega, Hellenic Petroleum, protestaban por unos recortes de salarios, amenazando con interrupciones de combustible.
RETRASO
Los responsables de la UE han criticado en varias ocasiones a Atenas por los retrasos en la implementación de reformas y los ministros de la zona euro pospusieron el desembolso de la ayuda en un mes hasta noviembre para mantener la presión sobre el gobierno heleno.
La troika dijo que las privatizaciones y las reformas estructurales eran las áreas más débiles e instó a Grecia a aumentar los esfuerzos en ellas.
"Como el progreso general ha sido desigual, un refuerzo de las reformas es el mayor reto al que se enfrentan las autoridades", dijo.
Pese a que se ha establecido un fondo de privatizaciones, los objetivos no se cumplirán en 2011, dijo la troika. El gobierno seguía comprometido a generar 35.000 millones de euros en ingresos para 2014.
El ministro de Finanzas griego, Evangelos Venizelos, que había se había reunido con los inspectores los últimos días, saludó el comunicado de la troika y dijo que era positivo y equilibrado, añadiendo que Grecia estaba decidida a recuperar su credibilidad.
"Por el bien del país, debemos ponernos al día con las reformas", dijo en un comunicado. "Es importante hacer todo lo que se debe hacer antes de desembolsar el tramo, incluso antes de la cumbre del 23 de octubre", dijo.
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