La hipótesis del estudio se centra en comprobar si la aplicación de esta terapia concreta puede aumentar el umbral de dolor (disminuir la percepción dolorosa objetiva), disminuir la tensión muscular y mejorar el retorno venoso de las extremidades inferiores, así como mejorar la calidad del sueño en pacientes con fibromialgia, rigidez muscular, artropatías y otras personas con problemas circulatorios.
El estudio, aprobado por el Comité de Ética de la Junta de Andalucía, y dirigido por el Dr. Juan Ribas Serna, catedrático de Fisiología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Sevilla, ya se está desarrollando en los hospitales universitarios Virgen Macarena y Virgen del Rocío de Sevilla.
Según la Sociedad Española del Dolor (SED), se estima que uno de cada seis españoles (17 %) sufre de dolor crónico, y los tratamientos actuales no ofrecen una total garantía de recuperación. Por eso la atención a la cronicidad avanzada es uno de los retos más importantes de los sistemas sanitarios públicos en España y en Europa.
El estudio terminará a finales de año y también se prevé publicar los resultados en revistas médicas especializadas. Los primeros resultados apuntan de forma positiva hacia un notable alivio del dolor en estos pacientes.
La andulación es una tecnología, creada por la multinacional alemana HHP, que combina vibraciones mecánicas controladas con calor por infrarrojos. Estos dos tratamientos se aplican mediante un dispositivo sanitario que mantiene al paciente en posición horizontal decúbito supino (boca arriba).
El dispositivo utilizado es ANDUMEDIC®3, un dispositivo sanitario registrado en la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, y con su publicidad autorizada por el Departament de Salut de la Generalitat de Catalunya.
Aunque esta tecnología ya se comercializa en Europa desde hace años para el alivio del dolor de diferentes patologías de origen musculo-esquelético, ahora la Universidad de Sevilla se propone estudiar sus efectos y comprobar los resultados en España.