Todo movimiento capaz de generar cambios de orden politico, económico y social en la estructura de un pais va precedido, en primer lugar de una causa y un causante. En nuestro caso la causa ha sido rapidamente localizada por todos, una crisis provocada por la especulación, la codicia y la permisividad politica, que ha dado como resultado que cientos de miles de ciudadanos lo estén pasando mal. Ahora bien, los causantes de la misma han sido politicos y financieros, los primeros, presionados por los grandes lobbys, se han sometido al dictado de éstos, dejando abandonado al ciudadano, que ha pasado a ser un actor secundario en todo este tinglado y el verdadero pagáno de la crisis.
Sin duda, dentro de los politicos, la culpabilidad del desastre es mas achacable al que gobierna que al que está en la oposición, aunque los primeros traten de retroceder en el tiempo para colocarle el muerto a los segundos. Lo cierto es que el gobierno de Zapatero negó la crisis, con lo cual la misma se debió producir durante su mandato, pero, además de negarla, no hizo lo suficiente para combatirla, no impulsó medidas económicas que ya estaban en marcha en paises como Alemania y Francia con los resultados que ahora vemos, siguió con el derroche y el despilfarro, en su mayor parte destinado a la compra de votos para perpetuarse en el poder, todo ello a base de endeudar cada vez mas a un pais que tiene uno de los deficits mas elevados del mundo. No acometió ningún cambio que tuviera como objetivo el impulso de la productividad y, sin embargo, si acometió planes que han resultado un fracaso, como el Plan E, el Plan de sostenibilidad, etc... todo un desastre y un dinero que se volvió a despilfarrar. Sus constantes desvarios en materia de politica exterior, con la creación y el consiguiente gasto de la Alianza de Civilizaciones, un capricho excentrico para la ideologia trasnochada de Zapatero, sus continuos regalos a colectivos internacionales de extravagantes radicales, en Africa, Asia, America Latina, etc... no han hecho mas que vaciar las arcas del pais, que, además y por si fuera poco, a uno de sus ministros, Solbes
se le ocurrió vender gran parte de nuestras reservas de oro a precio de ganga para luego ver como subia, quintuplicando su valor.
Este ha sido el gobierno que nos ha conducido al abismo y contra el que se debe hacer recaer el peso del estallido social, no sin recordar que son todas las instituciones las que se han degradado y requieren una transformación inmediata y profunda. Pero recordemos una vez mas que el detonante ha sido
Zapatero. Por eso cuando los manifestantes piden lo mismo que la ideologia zapateril debemos recordar que entre ellos hay muchos ciudadanos que pedimos otras cosas, sobre todo un cambio profundo de las estructuras del Estado. En eso estamos de acuerdo todos, pero como en toda revolución hay variedad de ideas porque no hay un cerebro colectivo, somos individuos a no ser que sea una revolución bolchevique que nos lleve a otra dictadura. Entonces ahi me tendrian de frente. Asi que seguiremos los acontecimientos sin dejarnos llevar por la manipulación ni la división, que de todo acontecimiento de esta magnitud se intenta hacer por partes interesadas.
Estigma
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