La verdadera vida

LA VERDADERA VIDA

Descubre la importancia de encontrar la pasión por las cosas por lo que vivimos.

 Hemos de vivir apasionadamente; creo que es importante el encontrar la pasión por la vida, su sentido, algo que sentamos propio, reflejada nuestra identidad.

Para que vivo, que me define, quien soy al fin y al cabo en este mar de dudas, en el caos que es el mundo son preguntas que nos hacemos constantemente, sobre todo en las sociedades modernas en las que la libertad de elección y la asunción de roles sociales es algo inherente a nuestra definición como mujeres.

El desencanto de nuestro  trabajo -un trabajo que en principio adoraba- la ha llevado a un total cuestionamiento de su vida.

Nos identificamos con nuestro trabajo demasiado a menudo. No es algo necesariamente perjudicial si es una dedicación que te apasiona, que te llena, una actividad que carga de vida tus días.

Si por el contrario lo que hacemos es delegar nuestra identidad a un estatus -buen trabajo, buena situación social, buenas apariencias en definitiva- lo único que hemos hecho nuestro es la consecución de ese rol social.

Hemos aceptado como propias, como una identidad, nuestra situación social. En vez de servirnos de unos valores sobre los que desarrollarnos hemos decidido vivir y al cabo ser, a través de estos valores sociales colectivos -sean cualesquiera que sean- en vez de escucharnos para averiguarlo.

No sólo hablo del culto a lo material y a la posición social, sino a cualquier tipo de dogmatismo que nos hace impermeables a nuestra propia verdad.

Hay esnobismos espirituales que se encarnan en el “carpe diem”, el cinismo y la contracultura como algo que define a una persona; cuando esto no deja de ser otra gran tribu, otra serie de convencionalismos en los que escondernos.

Hay que estar abierta a todo, a todas las personas y a su visión; y sobre todo, abiertas a nosotras mismas para averiguar quiénes somos.

Mírate en el espejo, sonríete, respira un momento y déjate llevar. Que quieres hacer con tu tiempo.

¿Disfrutas en un intenso trance estético cuando bailas ballet? ¿Te encanta tocar la guitarra eléctrica al estilo Seattle? ¿Por qué no lo haces? El hecho de que tus limitaciones actuales no te permitan ganarte la vida con tu pasión no quiere decir que sea ésta menos válida o menos hermosa que la de otros con más éxito, llamémosle práctico.

No dejarás de trabajar en la oficina, ni de cuidar de tu hijo, ni de cumplir con tus compromisos, pero tus días se llenarán de esa parte fundamental de ti; era su ausencia lo que teñía de gris el resto de parcelas de tu vida.

Muy pocos afortunados pueden vivir de su pasión.

La mayoría o nacieron o estuvieron en el lugar adecuado en el momento adecuado. Muchos que no creían poder hacerlo, lo hacen tras años de (apasionada) práctica gozosa, simplemente por amor a su arte.

Es muy importante saber qué le mueve a uno el corazón, tanto a nivel de inquietudes artísticas, sociales, mundanas… como puramente espirituales.

¿Por qué soy como se supone que debo ser? ¿Soy así de tranquila, así de fuerte…? Cónocete a ti misma, como dijeron los clásicos, y vive en consecuencia.

Un gran clásico, uno de los más grandes autores teatrales de la Historia, Esquilo; aclamado dramaturgo ya en vida, viene a despedirse en su tumba “Aquí yace un soldado griego que combatió al persa en Marathón”.

Escribió grandes obras; pero lo que le llenó el alma fue luchar por lo que creía justo y superior a sí mismo, dando la vida por ello.