La vida de un aspirante.
En la mayor parte de nuestras vidas somos aspirantes. En mi caso yo quisiera ser un gran escritor, pero como en mis otros escritos, la realidad es que la inspiración se va.
Pensando en esto me doy cuenta que eso a todos nos pasa, literalmente para cualquier aspiración.
Por ejemplo alguien que aspira a ser futbolista profesional, pero lamentablemente en ocasiones siente que pierde su tiempo en un sueño que no se va a concretar. También alguien que quiere ser actor. Hasta con cosas menos artísticas, cómo ser doctor o abogado. Es una vida constante de decepciones que nos llegan a pasar.
Despertar y pensar si eras suficiente para lograrlo, para saber si valía la pena todo aquel sacrificio.
Pero alégrate de eso, porque no todas las personas lo logran sufrir, eres especial por no pensar como la mayoría de personas, eres especial porque sufres por ser alguien destacado, por alguien que lucha por sus sueños. Jamás vas a ver a una persona ordinaria sufriendo por lograr sus sueños. Hablo de sueños, sueños que no cualquiera aspira.
Alégrate por ser un aspirante, alégrate porque ya eres mejor que muchas personas, tu vida es diferente.
Esa es la vida de un aspirante.
– Bryan Alvarez.