La vida es así, unas veces te dá alegrías otras tristezas, hay veces que las ves venir, otras te cogen por sorpresa...
Desde hace muchísimo tiempo, quizá desde mi adolescencia he intentado ser comprensiva con todo el mundo, pensaba que cada uno tendría sus motivos para actuar de una forma u otra. Con el paso del tiempo, de los palos dados, de las decepciones gigantescas, he llegado a ser más consciente de que en realidad la gente es muy egoista. Todo va bien mientras dejes pasar todo lo que a ellos les de la gana.
El problema viene cuando te paras y miras alrededor y te das cuenta que hay gente que no siente el mismo aprecio o cariño con el que tú miras al mundo. Es una pena porque esto me hace endurecer.
Antes era más sensible a cualquier cosa que le pasara a cualquiera. Ahora...., no....ahora es como si hubiese abierto los ojos y viendo las acciones de la gente comprendieran el porqué tienen una vida de mierda. Un día ví un experimento para demostrar si la suerte existía, colocaban a una mujer con un coche con problemas en una calle, localizaron a dos sujetos, uno con fama de tener buena suerte y otro con tener mala suerte y los hicieron pasar por esa calle. La voluntad del que tenía mala suerte fue pasar por al lado de la mujer, mirar que tenía el capó abierto y ver a una mujer con aspecto de preocupación...su actitud fue pasar de largo y agachar la cabeza.... La otra persona, la que tenía fama de buena suerte...pasó por el lado, vió a la mujer con el coche, y se acercó a ofrecer su ayuda, llamó a un conocido suyo que sabía de mecánica y al momento le habían solucionado el problema, todo se resolvió con una sonrisa y una cara de agradecimiento de la chica del coche.
Mi vida no es perfecta, pero estoy muy agradecida de mi vida, con sus momentos malos y sus momentos buenos. Hay gente que tiene problemas y hay que diferenciar la actitud con la que se enfrentan a esos problemas. Nadie sabe las necesidades que yo haya podido tener, porque en vez de hacerme la victima, me preocupaba por buscar soluciones. Hoy escribo esto porque de nuevo me han dado un palo, uno que no esperaba y que me ha dolido como hacía mucho que no me hacían daño. Una persona a la que quiero, con la que me mostraba solidaria con su situación.. Hoy me desvinculo de cualquier sentimiento de pena, cariño o solidaridad que pudiera tener. Hoy digo que cada uno se busque la vida como yo lo hago día a día y que otra decepción más así terminaría con mi pobre corazón, ya desencantado de tantas cosas y que hace que yo deje de sonreir, y ante esto os digo que primero yo, luego yo y más tarde por si acaso yo también....