Los derribos como todos sabemos son una constante en nuestra ciudad, están los derribo que nos trajeron los Franceses , o aquella República llamada la Gloriosa, los de los ensanches de los años 20, también los que trajo el franquismo tardío en los 60 y los 70 por no hablar de los cometidos desde los 90 hasta el día de hoy.
En este caso vamos a tratar un terrible derribo cometido en los años 20 del siglo pasado en pos de ese dichoso ensanche que debía elevarnos al erróneo nivel de ciudad europea de la época, digo lo de erróneo por que Sevilla ya era única y tal cual debió haberse quedado, ese derribo fue el de la Calle Alhóndiga...
Bonita imagen ¿verdad?, estamos viendo el Cristo de la Fundación de la Hermandad de los Negritos que acaba de dar la vuelta por la Plaza de la Paja o Ponce de León y que acaba de salir de la estrechez de la Calle Alhóndiga en busca de la Calle Imagen, pero claro me dirán ustedes, ¿esa es la Calle Alhóndiga?, ojo si se fijan a la derecha tenemos el edificio del antiguo Juzgado, y de fondo asoma una torre inconfundible...
Efectivamente es la torre de la Iglesia de Santa Catalina, tapada por completo por las viejas casas que comprendían el principio de la Calle Alhóndiga...
Casas que fueron derribadas para prolongar el ensanche que se quería hacer con la idea de unir la Encarnación con la Ronda, observen la siguiente superposición que les ayudara mejor a entender todo esto que les estoy explicando...
En ese derribo se perdieron edificios de una valor arquitectónico incalculable, como por ejemplo "La Casa de la Alhóndiga", donde podíamos encontrar restos de arquitectura nazarí de un calidad e importancia enorme. Al producirse dicho derribo, la fachada frontal de la Iglesia de Santa Catalina quedo por completo al descubierto siendo entonces cubierta con la puerta que procedía de la antigua Iglesia de Santa Lucia.
Como testimonio de la antigua morfología de esta calle nos queda aun la estrechez que va desde la Iglesia de Santa Catalina hasta la esquina con Gerona, tramo de calle que aun sigue rotulada como Calle Alhóndiga...
Maria López Canilla
ABC