Revista Cultura y Ocio
Leo la breve novela titulada La voz interior, de Jordi Sierra i Fabra (SM, Madrid, 1998), un ejercicio blanducho y descafeinado que a mis alumnos les gustaría más que a mí, y donde se cuenta la historia de una chica (Isabel Carreras) que ha sufrido un profundo shock (con intento de suicidio incluido) cuando una de sus amigas se ha chivado de que mantiene entrevistas, en la habitación del internado de monjas en el que se encuentra, con su novio. Una monja (sor María, profesora de lengua) tratará de aclarar quién ha sido la amiga lenguaraz, para hacerle comprender a la muchacha que ha procedido inadecuadamente y evitarle así futuros remordimientos de conciencia. Una viscosidad ideológica, ciertamente. Eso no obsta para reconocer que el autor ha sabido manejar un lenguaje y unas estructuras mentales muy adecuadas para su público adolescente. Pero, en fin, esto no va a ningún lado.