Esta es una de las poquísimas fotos que he hecho durante mis vacaciones (sí, ¡me he ido de vacaciones a mitad de septiembre!). Ha sido una semana MARAVILLOSA, muy diferente. Normalmente lo que nos gusta hacer en vacaciones es explorar, descubrir, no parar de movernos… pero esta vez ha sido todo lo contrario: de la piscina a la playa y de la playa a la piscina. Me he bañado en el mar por primera vez este año ¡y estoy morena!
Tras pensarlo mucho he decidido guardarme estos días para mi, me hubiera gustado hacer alguna entrada sobre los sitios que hemos visto pero quiero que estas vacaciones sean privadas y poder de vez en cuando recrearme en los recuerdos.
Volver ha sido raro y difícil. ¿La verdad? No quería volver. Tuve un pensamiento tipo “iré a donde sea sin nada en la maleta” mientras esperaba en la estación de autobuses. Pero yo no puedo vivir sin Romeo y sin Vader, así que volví a casa. Me dio tiempo a pensar en muchas cosas durante el trayecto y ahora tengo un plan. No se si podré cumplirlo algún día, si es demasiado fantasioso o imposible, pero por primera vez en muchos muchos años tengo un plan. Quiero hacer algo con todas mis fuerzas, no importa lo que cueste. Es el momento de planificar cómo hacerlo para que salga bien. Seguro que os ha pasado lo mismo alguna vez, ¿a que sí?
Ya me he puesto al día con todos los blogs y los correos que tenía pendientes, me fui sin ordenador y fue una decisión muy acertada, jajaja. A partir de hoy el blog vuelve a su rutina normal de publicaciones: lunes, miércoles y viernes. ¡Y os recuerdo que en octubre empiezan los cursos de la Escuela Online! Las primeras alumnas ya están apuntadas y os espero con muchas ganas :D