[ Vía: Ministerio de Salud de Chile ]
Nunca está de más resumir las increíbles ventajas de la lactancia materna. Así es como lo ve el Ministerio de Salud de Chile (las referencias que lo apoyan son mías):

La leche materna ha sido definida como un fluido bioactivo, que permite a los niños así alimentados tener menor riesgo de contraer enfermedades infecciosas y presentar menor incidencia y severidad de éstas. La leche humana contiene una variedad de elementos inmunológicos que destruyen bacterias, virus y parásitos. Esta propiedad es más relevante en países en desarrollo con elevadas cifras de morbimortalidad infantil por enfermedades diarreicas u otras infecciones. La leche humana, además de dar inmunidad pasiva al niño, acelera la maduración de sus órganos y sistema inmunológico.
Los niños amamantados tienen un mejor desarrollo de los arcos dentales, paladar y otras estructuras faciales y presentan una incidencia menor de caries que los niños que reciben mamadera.
Se ha observado que los niños amamantados son más activos, presentan un mejor desarrollo psicomotor y mejor capacidad de aprendizaje. También se ha demostrado que niños prematuros alimentados con leche materna tienen un coeficiente intelectual, medido a los ocho años, significativamente superior a los que no recibieron leche materna. Investigaciones recientes muestran una mayor agudeza visual entre los niños que fueron amamantados comparados con los alimentados con fórmula.

Es por ello que se considera que la interacción del niño o niña durante los primeros días, semanas y meses con sus padres, y la formación de las bases de su personalidad y seguridad en sí mismo, están estrechamente ligadas al amamantamiento.
La succión de la mama inmediatamente después del parto puede reducir en la madre el riesgo de la hemorragia, y estimula la secreción de oxitocina, lo que favorece la salida y el flujo de la leche y retracción del útero. La lactancia produce cambios metabólicos en la mujer que le ayudan a aprovechar mejor los alimentos que ingiere. Se asocia con un menor riesgo de cáncer de ovario, de endometrio y mamario en la premenopausia.
La lactancia es uno de los métodos más efectivos para espaciar los embarazos. La amenorrea de la lactancia exclusiva ofrece una protección de un 99% contra un nuevo embarazo durante los primeros seis meses.
En poblaciones donde el acceso a los métodos de planificación familiar son limitados o inexistentes, la lactancia exclusiva permite espaciamientos de los embarazos de alrededor de dos años. Un mayor intervalo entre los nacimientos permite a la mujer tener tiempo para recuperar sus fuerzas y su estado nutritivo antes de tener otro niño.

