En Vanity Fair nuestra chica de moda, declara las típicas vagedades del artista de éxito. Que si me siento sola, que si no soy capaz de tener a nadie a mi lado y sorprendanse, en un ataque de sinceridad comenta: 'me tapo la cara cuando tengo un orgasmo'.
Imaginense una entrevista digamos a Julio Iglesias padre o hijo que para el caso es igual y en unas declaraciones donde ponen los pies en la tierra para hacerse sentirse mas terrenales y ganar afecto y vender más discos -no hay otra señores- dijeran con toda la naturalidad del mundo; yo me la sacudo tres veces después de orinar. O a Alejandro Sanz con un toque sentimental diciendo; las hemorroides y yo tenemos una relación extraordinariamente dolorosa. Lo dicho, la nueva estrategia de marqueting de la Gaga es hablarnos de su orgasmos. La próxima después de sus paseos sin ropa interior y de mostrarnos sus piercings vaginales serán los orgasmos en vivo y en directo. Al tiempo. Y todo por un millón más o un millón menos de discos vendidos.